Este 31 de julio de 2024 se cumplen 43 años de la partida física de un líder de Latinoamérica que se consagró como tal en el siglo XX. Hay personas que podrán estar de acuerdo o no con el pensamiento político del General Omar Torrijos Herrera, pero su legado en la consolidación de la soberanía panameña es innegable.
Fue un dirigente con dignidad, patriotismo y visión nacional; entendió el problema que afectaba a la nación, con su territorio dividido y la presencia de otro estado con personal civil y militar, lo que era motivo de conflicto permanente en las relaciones de las dos naciones.
La patria estaba herida por la muerte de sus hijos en las distintas jornadas patrióticas que caracterizaron la historia de nuestra sociedad.
Torrijos Herrera supo combinar la política interior, llevándola al plano exterior; Logró la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en Panamá el 15 de marzo de 1973 en el Palacio Justo Arosemena, con sus 15 miembros. Marcando un giro en la historia por la recuperación del Canal y su área adyacente.
Omar liderizó un equipo de negociadores con personalidades, jóvenes, profesionales, empresarios, periodistas e intelectuales que percibían la magnitud de lo que se negociaría.
Torrijos, joven veragüense que estudió en la Academia Militar en San Salvador, con 39 años ganó las riendas de nuestra nación. En 1973, recoge el sentimiento de patria y se sienta con la potencia norteamericana; se logra una resolución que apoyaba la causa panameña, con 12 votos a favor, tres abstenciones y el veto de los Estados Unidos. Así inicia su recorrido y en cada continente expuso la causa panameña ante la conciencia mundial.
Nuestro reconocimiento a Jimmy Carter, presidente número 39 de los Estados Unidos, porque, a pesar de la oposición que había en el Senado con relación al Tratado de Neutralidad y el Tratado del Canal de Panamá, lo impulsó.
Finalmente, se logra la ratificación por un voto y las relaciones entre los dos países son más equitativas desde entonces, y Panamá ya es soberano en todo su territorio.
El legado de Omar trasciende generaciones.