Balboa: héroe o villano

Quinientos años después del avistamiento del Mar del Sur, el nombre de quien figuró frente a la corona española como el descubridor del océano Pacífico, Vasco Núñez de Balboa, sigue generando controversia.

‘El Hidalgo’, como también era conocido Balboa, salió de Santo Domingo en 1509 dentro de un barril llegando a tierras istmeñas.

En 1513, Vasco Núñez de Balboa emprende la conquista de los territorios de los caciques Careta, Ponca y Comagre, donde escucha por primera vez de la existencia de otro mar por parte de Panquiaco, hijo mayor de Comagre.

Los relatos sobre la existencia de un reino al sur, de una población rica que utilizaba vajillas y utensilios en oro para comer y beber, hizo que este conquistador emprendiera la búsqueda de las nuevas aguas.

Su búsqueda empezó el 1 de septiembre de 1513, en compañía de 180 hombres. Cuentan que el conquistador se adelanta en la expedición que atravesó el río Chucunaque.

Su llegada a la cumbre del cerro Pechito Parao, en Darién, de donde divisó aquel 25 de septiembre el nuevo mar, marcó la expansión de la conquista española por toda América. ‘Avistamiento’ fueron las primeras palabras de Balboa al ver el Mar del Sur.

Cuando la expedición llegó a las playas, Balboa levantó sus manos, en una estaba su espada y en la otra un estandarte de la Virgen María, entró a las aguas hasta el nivel de las rodillas y tomó posesión del Mar del Sur en nombre de los soberanos de Castilla.

El hallazgo atribuido a Balboa, no es bien visto por algunos historiadores que se inclinan por la versión de que el nuevo mar fue visto por primera vez por el indígena Bad Giakwa, que en libros aparece como Panquiaco.

Este joven, al igual que indígenas de la región de Santa María, en Darién, conocían de la existencia del océano.

Hoy, 500 años después, los historiadores consideran que con el descubrimiento del nuevo mar, Panamá obtuvo beneficios, pero también perjuicios, pues se implantó la idea de que la región era una área para importar riquezas y no para mantenerlas.

Este criterio lo plantea el profesor de Historia y escritor César del Vasto, quien ha llegado a la conclusión de que el descubrimiento del nuevo mar convirtió a Panamá en un sitio con una posición privilegiada y en punto estratégico de comercialización para el Nuevo Mundo.

‘Panamá desde el avistamiento ha sido vista como una región para usarse, así lo entendieron los antepasados y los poderosos sigan usándola’, señaló Del Vasto.

A la llegada de los españoles a tierra firme, según Del Vasto, solo se conocía el 60% del mundo, pero al darse el avistamiento, las puertas para admirar nuevas tierras fueron abiertas.

Tras el descubrimiento del océano Pacífico, como se le conoce a las aguas que conquistó Balboa, en el Istmo se dieron los primeros vestigios de comercialización internacional con el traslado de oro, plata y especias tanto del Nuevo Mundo como de las tierras conocidas.

Según el experto en historia, el avistamiento favoreció el desarrollo de naciones como Inglaterra, Alemania, Francia y otras regiones de Europa, pero no el de España, mucho menos a Panamá y las nuevas tierras colonizadas.

‘Los conquistadores se asentaban en las nuevas colonias y luego de los años se iban con las riquezas’, aseguró.

Aunque han transcurrido 500 años, según Del Vasto, este comportamiento comercial aún es practicado por los grandes países inversionistas que han visto a este territorio solo como un país de intercambio de mercancía y no para acumular riquezas. ‘Los conquistadores encontraron en el océano Pacífico la ruta que conectó el mundo conocido con Asia’, sostuvo.

‘AVISTAMIENTO, UNA HECATOMBE’

El descubrimiento del Mar del Sur también produjo la importación de personas, de enfermedades, el mestizaje y la destructuración de las sociedades que ya existían en América, según comentó la catedrática de Historia de la Universidad de Panamá, Marcela Camargo.

‘Al conocerse sobre el nuevo mar, se produjo una hecatombe’, indicó Camargo, quien considera que si bien la colonización no alcanzó a todos los grupos étnicos, sí logro trastocar la organización de las sociedades.

A partir del descubrimiento, los españoles entendieron la posición estratégica en la que se encontraba Panamá, por lo que fue denominada ‘lugar del tránsito y paso de personas y mercancía a otras tierras, señaló.

Según esta catedrática, la conquista fue la punta de lanza para que se promoviera una mayor comunicación entre España, Asia y América.

Camargo cuenta que la existencia del nuevo mar, lejos de tener resultados positivos para los pueblos indígenas, provocó que los nativos vivieran una época de tragedia.

Con esa opinión coincide el docente, catedrático y antropólogo Bernal Damián Castillo, quien considera que tal descubrimiento trajo consigo el abuso de las mujeres, la muerte violenta de sus ancestros y el derramamiento de sangre de los nativos a causa de los españoles.

A los hechos de sangre se le suma la pobreza en la que sumergieron a los pueblos indígenas, luego de los ataques.

Más que un descubrimiento con beneficios, para las culturas aborígenes significa un hecho trágico y sangriento, concluye Castillo.

RECORDADO POR UNA CASUALIDAD

Aun cuando en la actualidad Balboa es recordado como el héroe del Nuevo Mundo, los historiadores difieren con la actualidad actual.

‘Balboa fue un descubridor por casualidad, pues fue un delincuente que quería hacer méritos ante la corona’, dijo Del Vasto.

‘Cuando llegó a Panamá, se encargó de someter a los pueblos aborígenes para quedar bien con España’, indicó.

La misma conclusión tiene Camargo, quien cuenta que antes de que Balboa llegara a estas tierras, los ancestros

utilizaban y conocían el mar solo que no lo habían proclamado.

En medio de la celebración de los 500 años del descubrimiento del océano Pacífico, el profesor Castillo prefiere no tomar partido de tal festejo, pues asegura que para los pueblos indígenas representa una fecha de reflexión por las muertes que cobró la conquista.

‘Hoy no celebramos el descubrimiento porque fue el inicio de la tragedia de nuestros ancestros’.

Para los nativos, Balboa no representa un héroe, sino un ladrón polizonte, expresó Castillo.

Aunque un sector de la sociedad considere polémico la conquista del nuevo mar, gremios empresariales como la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresas señalan que el avistamiento del Mar del Sur forzó un crecimiento comercial, acortó caminos, propagó enfermedades, pero la historia señala que nada fue igual después de ese día.