El poder de las redes no zoociales

Gente usa las redes sociales con los cascos. Más que sociales, a veces son más zoociales. Pero peores son los Nerón, que quieren acabar con ellas. Ni les avergüenza mostrar el Pinochet de su corazón.

Que emulen al México lindo, querido y admirable de ingenio y solidaridad con sus semejantes en esta andanada tectónica de ese mes. Fatídico más. Las redes sociales para ayudar a las víctimas del sismo en México.

Uno puede promocionar y buscarle una función generosa a las redes sociales –me interesa la buena polític a y la buena gramática-, pero no alardear de censor y procensor en el mejor estilo de Pinochet, que no me vaya a jalar a pata desde ultratumba. Como alardean muchos ‘notables' patrios, que se les nota ese tufo rancio contra la libre expresión.

Golpeado por un sismo de 7.1 grados, con epicentro en el estado de Puebla, su vecina Ciudad de México fue la más afectada. Con muchos fallecidos, miles de heridos y màs de 40 edificaciones colapsados o derrumbados.

Minutos después del sismo, usuarios de redes sociales comenzaron a distribuir información. Mientras las instituciones correspondientes no declaraban daños o muertos en la ciudad, internautas se adelantaban a pedir ayuda por el derrumbe de algunos edificios. Una de las primeras imágenes que circuló mostraba la Ciudad con diversos puntos de la urbe cubiertos de polvo, síntoma de estructuras colapsadas.

Twitter y Facebook se llenaron de publicaciones para solicitar voluntarios –también rescatistas-, equipo de rescate como: palas, picos, medicina, material médico.

Pueden ser arma de doble filo y propagar bulo a vel ocidad instantánea. En su mejor uso, pueden mover, de manera proverbial, la solidaridad de ciudadanos con muchas dificultades, a la que se suma esta catástrofe.

Telcel, AT&T y Movistar abrieron sus redes para operaciones de llamar, mandar mensajes y usar datos sin costo, y usuarios liberaron sus contraseñas de acceso a internet.

Periodista y filólogo