Fue un combate largo y de mucha resistencia. Tal como advertimos semanas atrás, la pelea comenzó en una esquina, pero pronto se fueron sumando más contendientes, hasta extenderse incluso a la lejana provincia de Bocas del Toro. Allá, el escenario fue distinto.

Los docentes —no todos del sistema oficial— se sumaron a la lucha contra la Ley 462 del Seguro Social, la cual, sostienen, disminuirá el “chenchén” de las pensiones futuras.

Mientras tanto, los obreros comenzaron a retirarse del conflicto, bajaron del ring y regresaron a las construcciones. Pero los maestros se mantuvieron firmes en las calles y en los predios de la Asamblea, denunciando lo que consideran un retroceso en materia de seguridad social.

En medio de las manifestaciones, ocurrieron hechos que conmocionaron a la opinión pública, como el caso de una niña herida cerca de la Universidad, lo que desvió los reflectores hacia ese punto específico.

Con el cambio en la directiva de la Asamblea, vieron una oportunidad para visibilizar el tema. Al mismo tiempo, los bancos comenzaron a enviar mensajes de cobro por préstamos pendientes, lo que complicó aún más el panorama.

El Meduca, por su parte, inició el reemplazo de maestros en los centros educativos, tras varios meses sin clases para miles de estudiantes.

Finalmente, hubo humo blanco. Y ahora, según las autoridades educativas, las clases en las escuelas se retomarán como antes.