Camionero estrangulaba prostitutas para excitarse

La mañana del 17 de noviembre de 2006, un camionero llamado Volker Ecker fue arrestado por la Policía cuando se encontraba en su casa de Colonia, en Alemania.

Los agentes sospechaban que había matado a varias prostitutas a lo largo de varios años. Tenían razón.

Cuando los investigadores revisaron su vivienda encontraron mechones de pelo y pedazos de ropa de sus víctimas.

Además, en la cabina del camión que manejaba, hallaron fotografías de las mujeres que había asesinado, la mayoría aparecían amordazadas, violadas y asesinadas.

A Eckert no le quedó más remedio que confesar sus crímenes a la Policía y dijo haber estrangulado a tres prostitutas en España y dos en Francia.

También dijo que en 1974, cuando apenas tenía 15 años y era un colegial, estranguló a una compañera de clase en Alemania.

"Estoy tan desquiciado que me siento aliviado por el arresto. Al fin me habéis detenido. Yo no podía parar de hacer esto. Sólo así, matando a las mujeres, disfruto del sexo. Sé que eso está mal, que así no podía seguir, y por eso tenía pensado entregarme dentro de un año", dijo fríamente tras ser arrestado.

Declaró que solo matando obtenía placer sexual cuando miraba el rostro de las mujeres en el momento que las estrangulaba.

Eckert, para cometer sus asesinatos, utilizaba el camión con que recorría varios países en los últimos 7 años.

Y como dicen que no hay crimen perfecto, Eckert cometió un error, pues todo se descubrió cuando tras dejar una carga de 20 toneladas de plástico en una empresa en Girona, España, se dirigió a un campo de fútbol, donde se detuvo y esperó que cayera la noche.

Una vez que todo quedó en silencio y en total oscuridad, sacó del camión un bulto, lo arrojó al suelo y luego lo arrastró al bosque. Era el cadáver de la prostituta búlgara Miglena Petrova Rahim, de 20 años, a la que había estrangulado horas antes.

Lo que no contaba el asesino en serie es que al retirarse del lugar una cámara de seguridad de una empresa cercana al sitio grabó su vehículo y esas imágenes fueron la pista para que las autoridades dieran con él y lo capturaran en su casa.

La Policía dijo que en la cabina del camión hallaron "varias fotos" de otras mujeres muertas, aún no identificadas y que posiblemente mató a más mujeres en otros países europeos.

Tras ser enjuiciado en 1988, Volker Eckert, fue condenado a 12 años de prisión por delitos de violación, malos tratos y varios intentos de asesinato.

El estrangulador de 1,80 de estatura, delgado, de cara afilada y ojos oscuros, fue durante muchos años un oscuro conductor de uno de los 800 camiones de una empresa alemana.

Dicen que tenía pocos amigos, y solo se relacionaba con prostitutas.

"Estamos delante de una persona enferma, que tiene un grave problema, y ésa era su manera de excitarse sexualmente", comentó uno de los inspectores que llevó el caso.

El 2 de julio de 2007, Eckert fue encontrado muerto en su celda, un día después de cumplir 48 años. Se había ahorcado.