Periodistas, pero ante todo madres

Entre juguetes, tareas y uno que otro llanto, así se redactan algunas noticias de El Siglo y La Estrella de Panamá. Nadie se imagina que detrás de estos textos hay una madre que diariamente hace malabares para cumplir al 100% con sus dos realizaciones personales: estar presentes en las vidas de sus hijos y seguir en un ámbito profesional que no tiene horarios de salida o entrada.

Ivette Leonardi, editora general de la Estrella de Panamá, Yanisel Cedeño, periodista multitask y Keila Rojas, editora web en la Estrella de Panamá, hicieron un espacio en sus agendas para compartir cómo combinan estas dos (y exigentes) carreras, en medio de la pandemia.

Desde su hogar, ahora sala de redacción, Ivette, recién estrenada en la maternidad, comenta que después de un año todavía se le dificulta tener un balance entre sus entrevistas con figuras públicas de talla nacional e internacional y su pequeña Lucía, la niña de sus ojos, y quien la llena de felicidad.

‘Mi mejor primicia es lo que puede hacer mi hija a la que le brindo mayor calidad de tiempo gracias al teletrabajo, que me permitió estar con ella en su primer año de vida, algo bueno que dejó la pandemia', expresó.

Entre sus anécdotas, Leonardi recuerda cuando tuvo que suspender en varias ocasiones una entrevista para darle de comer a su bebé de apenas cuatro meses, porque su llanto desgarrador le partía el alma.

‘En medio de una entrevista vía zoom con una productora de cine, tuve apagar la cámara varias veces para darle pecho, porque no dejaba de llorar… es muy complicado llevar ambas facetas , pero nosotras como madres y mujeres sí podemos hacerlo', manifestó.

Pero Ivette no es la única que ha tenido retos, Yanisel Cedeño, del Siglo Digital y madre de Leví Alejandro, de siete años, también se ha enfrentado a dificultades, entre ellas hacerle entender que no podían salir de casa como antes, a causa de la pandemia.

Confiesa que estar en casa durante estos dos años seguidos ha significado mayor trabajo, porque debe estar pendiente de muchas situaciones a la vez.

‘Mi horario de trabajo y las clases de mi hijo coinciden, y a veces cuando estoy redactando una noticia, él me está llamando porque no sabe qué hacer o decir, y debo suspender lo que estoy haciendo para atenderlo… mi rutina diaria es estar en teletrabajo, terminar y empezar a hacer tareas', explicó esta madre que muchas veces inicia sus jornadas laborales a las 6:00 a.m.

Pero aunque el cansancio le gana, Cedeño afirma que no hay nada mejor que estar con su hijo, porque puede brindarle toda la atención que necesita y, sobretodo, cumplir con todas sus tareas a tiempo. ‘Él ya está acostumbrado a verme en la casa, creo que cuando regresemos al trabajo le va a costar un poco entender que me verá, solo en las noches', adelantó.

El testimonio de Keila Rojas, editora web y periodista en La Estrella de Panamá, no se aleja de los anteriores. Ella afirma que la clave para mantener un orden entre lo familiar y profesional durante la pandemia fue la organización.

‘Mi hija sentía que al verme en casa tenía a su mamá disponible para todo, pero no era así, porque yo tenía que laborar al igual que mi esposo, así que hicimos una dinámica entre los tres para que ella no perdiera su independencia aun estando en casa', explicó.

Detalló que aunque la adaptación no fue fácil, fue necesaria para todos los miembros de su familia y para su trabajo, el cual conlleva mucha responsabilidad, pues debe estar atenta, junto con su equipo de trabajo, minuto a minuto de lo que sucede fuera y dentro del país.

‘Mi experiencia de teletrabajo como mamá gracias a Dios fue diferente e interesante', añadió. Las tres mujeres, madres y periodistas coinciden en que la maternidad no le resta profesionalidad a su trabajo y que el periodismo, por más demandante que sea, también le ha permitido compartir grandes momentos con su hijos.

Este 8 de Diciembre queremos agradecer a todas las madres del país que, al igual que nuestras compañeras, no han dejado de trabajar y luchar sin descanso por sus familias. ¡Felicidades a todas!