El 6%, una deuda del Estado con la Educación

Hay normas en Panamá que solo están en papel y no se cumplen. Esto sucede con el artículo 266 de la Ley Orgánica de Educación, que establece que el gasto público en educación no será inferior al 6% del Producto Interno Bruto del año anterior.

Han pasado casi 27 años, cuando la Ley 34 del 6 de julio de 1995 modificó la Ley Orgánica de Educación e introdujo el 6%, pero históricamente esto no se ha cumplido y menos en la pandemia. A duras penas se logra un entre un 3.5 % a un 4.0%

El exministro de Educación, Miguel Ángel Cañizares, asegura que ningún periodo presidencial ha cumplido y se dedica un porcentaje bajo comparado con el del resto de los países. Se encuentra en el puesto 143 de los 192 países que componen el ‘ranking'. En referencia al porcentaje que supone la inversión en educación al presupuesto gubernamental (gasto público), Panamá está en el puesto 151.

Explicó que el presupuesto dedicado del PIB a educación ha variado de 4 a 4.40%, en los años 2000 a 2004, en el 2005 tuvo una caída del 3.5% y continuó bajando hasta el 2010 con un 2.5% del PIB. ‘Los periodos que menos se ha invertido en educación fue del 2015 al 2017, fluctuando de 2.84% a 2.88%: sin embargo, donde hubo mayor inversión fue en los años de 1999 al 2003, fluctuando de 4.5% a 4.19% del PIB', detalló.

Mientras que mencionó que el gasto público en educación del 2019 alcanzó el 3.13% del PIB, una subida 0.25 puntos respecto a 2018, en el que fue el 2.88% del PIB. En 2019, Panamá subió del puesto 84 que ocupaba en 2018 al 79 en el ranking de países por importe invertido en educación al año.

El experto hizo mención que si se ejecutará con el 6% del PIB, se podría: construir más escuelas; permitiría nombrar más profesores; ampliar los comedores escolares; facilitarles libros gratuitos a los estudiantes de escuelas oficiales; instalar laboratorio de ciencias e informática; hasta crear un ‘Observatorio de Educación'.

También permitiría ingresar al nuevo mundo de la educación con la transformación digital; se podrá perfeccionar la capacitación del personal docente de alto rendimiento.

El 6 % del PIB se traduce en una educación pública de calidad, según dirigentes magisteriales. Fernando Ábrego, secretario general de la Asociación de Profesores de la República de Panamá (Asoprof), dijo que han pasado años, y si se hubiera respetado con la ley, en estos momentos, no se estaría hablando de un 6% sino de un 10%.

‘Las condiciones en que están las escuelas es el reflejo del abandono que se han dado', expresó Ábrego, cinco días antes de que los estudiantes retornen de manera presencial, luego de que las escuelas estuvieron cerradas por la pandemia.

Por su lado el dirigente magisterial, Diógenes Sánchez, explicó que el 6% es una de la lucha que han tenido y que ningún gobierno ha garantizado; Panamá a penas logra invertir 3.5%.

‘El gobierno tiene una gran mora presupuestaria con el Ministerio de Educación, que nunca logra obtener los recursos suficientes para atender casi 3 mil escuelas para más de 700 mil estudiantes en el sector público. Es una gran deuda que tiene el estado con la educación', recalcó el docente.

El PIB de Panamá en el 2021 se calculó en $63.7 millones. Lo que indica que deberían ir a la educación $3.8 millones (6%). Pero entre funcionamiento e inversión, el presupuesto es de aproximadamente 1.7 millones de dólares. En el 2021, fue $1.8 millones.

El consultor económico, René Quevedo, coincide con la idea de aumentar la inversión educativa, pero aclaró que el mero incremento en la cantidad de recursos no mejorará la calidad de un sistema educativo históricamente divorciado de la realidad laboral y económica del país.

Citó de ejemplo, que entre el 2008 y 2018, el Estado invirtió más de $15.5 mil millones en educación; sin embargo, los jóvenes (15 a 29 años) que obtenían uno de cada 4 nuevos empleos generados por la economía entre el 2004 y 2009, solo obtuvieron uno de cada 27 nuevos empleos generados por la economía entre el 2018 y 2019.