• sábado 13 de julio de 2024 - 5:52 PM

Turismo en algunos lugares de España.

Este mes de julio de 2024, una noticia internacional llamó la atención. En Barcelona fueron agredidos unos turistas, por residentes molestos por su presencia y de allí, los siguientes titulares: “¿Qué está pasando en algunas ciudades españolas con los turistas?” Donde más de 3000 ciudadanos barceloneses de 140 organizaciones manifestaron su descontento por el exceso de “turismo descontrolado”. Dicen sus voceros, que esto se debe a los problemas que crea el sector turístico en las áreas de trabajo, residencias y el aumento de la demanda de alojamiento que incrementa los precios de la vivienda para los nacionales; expulsando a los residentes locales hacia las periferias, ya que se les hace difícil pagar las rentas, principalmente a los jóvenes.

El turismo, si bien tiene su impacto positivo en la economía española, también afecta, según los manifestantes, a los ciudadanos locales, sobre todo por la demanda de bienes y servicios que incrementan el costo de la vida, haciéndolo insostenible.

La contaminación es otra de las consecuencias negativas, pues afecta el medio ambiente con los residuos y desechos que afectan las ciudades, interfiriendo en la calidad de vida de los ciudadanos, incluyendo áreas verdes y playas.

El turismo sin control está llevando a la erosión, destrucción de hábitats y pérdida de biodiversidad.

A pesar de los ingresos generados por el sector turístico, la pandemia del COVID-19 cambió las preferencias de los españoles, como reflejan las estadísticas del año 2023, cuando aumentó la demanda de turismo local, con sus familias que optaron por visitar las distintas regiones españolas y decidieron gastar en los comercios locales.

Señalan a los manifestantes que otras de las áreas afectadas por el turismo son los patrimonios culturales y naturales del país.

El reto que tiene España en ciudades y regiones como Madrid, Canarias y Baleares es grande, ya que el turismo es fundamental.

Pero a la vez tienen que proteger a los ciudadanos y comunidades locales del alto costo de la vida, mientras deben salvaguardar los ecosistemas naturales y los patrimonios culturales.

Es importante que podamos entender este contexto para lograr un equilibrio entre crecimiento, desarrollo y calidad de vida de los ciudadanos.

Este mes de julio de 2024, una noticia internacional llamó la atención. En Barcelona fueron agredidos unos turistas, por residentes molestos por su presencia y de allí, los siguientes titulares: “¿Qué está pasando en algunas ciudades españolas con los turistas?” Donde más de 3000 ciudadanos barceloneses de 140 organizaciones manifestaron su descontento por el exceso de “turismo descontrolado”. Dicen sus voceros, que esto se debe a los problemas que crea el sector turístico en las áreas de trabajo, residencias y el aumento de la demanda de alojamiento que incrementa los precios de la vivienda para los nacionales; expulsando a los residentes locales hacia las periferias, ya que se les hace difícil pagar las rentas, principalmente a los jóvenes.

El turismo, si bien tiene su impacto positivo en la economía española, también afecta, según los manifestantes, a los ciudadanos locales, sobre todo por la demanda de bienes y servicios que incrementan el costo de la vida, haciéndolo insostenible.

La contaminación es otra de las consecuencias negativas, pues afecta el medio ambiente con los residuos y desechos que afectan las ciudades, interfiriendo en la calidad de vida de los ciudadanos, incluyendo áreas verdes y playas.

El turismo sin control está llevando a la erosión, destrucción de hábitats y pérdida de biodiversidad.

A pesar de los ingresos generados por el sector turístico, la pandemia del COVID-19 cambió las preferencias de los españoles, como reflejan las estadísticas del año 2023, cuando aumentó la demanda de turismo local, con sus familias que optaron por visitar las distintas regiones españolas y decidieron gastar en los comercios locales.

Señalan a los manifestantes que otras de las áreas afectadas por el turismo son los patrimonios culturales y naturales del país.

El reto que tiene España en ciudades y regiones como Madrid, Canarias y Baleares es grande, ya que el turismo es fundamental.

Pero a la vez tienen que proteger a los ciudadanos y comunidades locales del alto costo de la vida, mientras deben salvaguardar los ecosistemas naturales y los patrimonios culturales.

Es importante que podamos entender este contexto para lograr un equilibrio entre crecimiento, desarrollo y calidad de vida de los ciudadanos.

El turismo sin control está llevando a la erosión, destrucción de hábitats y pérdida de biodiversidad.<font style="vertical-align: inherit;"
Últimos Videos
comments powered by Disqus