En 2016 se registraron 35 mil delitos de alto impacto

SEGURIDAD

¿Qué hace en este ministerio una persona poco familiarizada con la seguridad?

Tiene un gran componente legal. Yo tengo en mi portafolio tres ingredientes, una parte de reingeniería institucional, que es la eficiencia de los procedimientos, y para eso la parte legal es muy importante, y en una segunda instancia está la cooperación en asuntos internacionales. El ministerio maneja cerca de $30 millones que recibimos de países amigos y se requiere que hagan sinergia y se revisen con lupa los trámites, resoluciones y resueltos. La Dirección de Asuntos de Seguridad Pública lleva 5300 trámites en la presente administración. Todo esto conlleva una verificación y, por supuesto, la implementación de la seguridad pública.

¿Cuál es la estadística de delitos comunes registrados este año?

La estadística criminal se compone de un conjunto de delitos. Nosotros estamos midiendo los delitos de impacto, que son aquellos que tienen mayor trascendencia en la vida, honra y bienes de los ciudadanos. Ahí estamos hablando de una estadística de 35 mil delitos de impacto. Esos son los delitos de robo, hurto, homicidio, lesiones personales.

¿Cuántos se registraron el año pasado?

Hemos tenido una disminución de un 8% al 10% en comparación con el año pasado.

¿Cómo le hicieron para bajar en un año a la mitad los delitos de alto impacto?

La estrategia de seguridad se va afinando, esto es en función del comportamiento de la criminalidad. Todas las semanas el señor presidente, este servidor, y el ministro Alexis Bethancourt y los estamentos de seguridad, nos reunimos para analizar el comportamiento de la criminalidad a nivel nacional. En función de ese comportamiento –porque la bandas se movilizan de un lado a otro– nosotros vamos corrigiendo y afinando. ¿Qué ha impactado a estas cifras?, el programa ‘Barrios seguros', la unidad antipandillas (que ha judicializado a más de 58 personas bajo la presente administración y hemos encausado a más de 1,100 personas), el desmantelamiento de redes de trata de personas, ya que hemos desmantelado a más de 14 bajo esta administración y rescatado más de 50 víctimas, recuperado más de 3,500 armas de fuego y por supuesto incautaciones de droga récord.

¿Qué está haciendo el Gobierno para que esos jóvenes alienados de 15 a 29 años que no encuentra un empleo formal no estén delinquiendo?

Yo le voy a decir que la forma en que estamos tratando y lo estamos intentando, sentimos que vamos en la dirección correcta. En primer lugar, hablamos de prevención a nivel primario, secundario y terciario. A nivel primario, con todas las clases vulnerables del país está trabajando el Gobierno en el plan para la remodelación de todas las escuelas a nivel nacional a través del programa ‘Mi Escuela Primero', hemos implementado el programa ‘Panamá Bilingüe'. Nuestro país está generando empleo, trabajar en el sector secundario de prevención tenemos el programa ‘Barrios Seguros' que es para jóvenes en riesgo social bajo el Ministerio de Seguridad Pública. El programa tiene como finalidad ofrecer una oportunidad de cambio de vida a los jóvenes. Un joven de riesgo social se define como alguien que, gracias a nuestros informes de inteligencia, hemos identificado que son las personas que tienen algún vinculo con pandillas u organizaciones criminales. Ese es un joven de riesgo social. Aquí hay una labor que se realiza a través de la unidad antipandillas para identificarlo. El programa ‘Barrios Seguros' genera una fuente de captación de estos jóvenes a través de centros que funcionan en coordinación con el Ministerio de Seguridad. A través de estos centros, nosotros hacemos una evaluación del cuadro familiar, hacemos una evaluación psicológica del muchacho y empezamos a trabajar con él en el desarrollo de habilidades blandas, comunicación y paralelamente le añadimos un componente de formación vocacional y técnica. Cuando el joven tiene entre 4 y 6 meses de mostrar un buen comportamiento y bajo el seguimiento que tiene del ministerio, nos enfocamos en encontrarle un trabajo en el sector laboral. Estamos trabajando con empresas contratistas del Gobierno en construcción y en Minera Panamá, ahí tenemos 20 jóvenes que han podido dar ese salto. Hemos logrado reinsertar a 760 jóvenes.

Los ciudadanos no tenemos una medición verificable del programa ‘Barrios Seguros'...

Yo entiendo lo que usted me plantea, pero déjeme explicarle que cuando uno trabaja con jóvenes de riesgo social, tiene que asesorarse. Nosotros estamos mejorando el programa.

¿Por qué no hacen una auditoría externa para que se identifiquen sus debilidades y fortalezas?

Bueno, nosotros tenemos que evaluar y no tenemos ningún problema con eso, nosotros presentamos las cifras.

De los subsidios que se les dan a los muchachos no estamos seguros que lo usan para comida, ¿qué hacen al respecto?

Nosotros hicimos una revisión del programa. Eso que menciona lo estamos atendiendo con la emisión de carnés del programa ‘Barrios Seguros' y con un registro que los comercios nos proporcionan de cómo es el comportamiento de los bonos, que prohíben que sean cambiados por otras personas. Estos son correctivos y medidas administrativas de control. Por supuesto que este tipo de conductas conlleva a la expulsión del programa.

¿Cuánto se ha invertido en estos subsidios?

El programa tiene un costo de $10 millones, conlleva no solamente los subsidios sino el equipo multidisciplinario. Pero lo que se le da a los jóvenes en bonos totaliza cerca de $3 millones.

Cuando salen del empleo, ¿quién le da seguimiento a estos jóvenes?

Nosotros tenemos una oficina con 50 personas que se encargan de darles seguimiento, estamos haciendo un gran esfuerzo de la mano de organismos internacionales como la OIT.