- sábado 02 de noviembre de 2024 - 12:00 AM
Infidencias y confidencias del 2 de noviembre de 2024
Jugada monetaria. Sigue el juega vivo violento en ciertos hospitales con jefecitos que se ponen turnos para cubrirse las andanzas en la práctica privada, no atienden a los pacientes y solo hacen la papelería que debieron hacer en la mañana. Berracos.
Pa’l taburete. Después de tres extensos períodos, uno de los mosqueteros electorales se despide en diciembre de 2024. Y como si ya no fuera tanto tiempo, los manzanillos, corrijo, los asesores, le dicen que debe consolidar su legado. Todo tiene su final, nada dura para siempre.
Expulsada. La cosa sigue candela por la Udelas, corrió como pólvora la expulsión de la rectora electa en tiempos de pandemia. La resolución lleva la pata de gallina de la señora que dejó el Santo sentada en el trono universitario.
Cuenta pendiente. Resulta que a la gente de las Becas se le olvidó que el 24 va de salida y los pela’os becarios con discapacidad siguen sin ver un centavo. Y ahora más que nunca necesitan ese chenchén, porque las citas médicas no bajan de 90 palos y las terapias de 35. ¿Qué pasa ahí, Jaimito?
Afincando el diente. Como que la reforma a la ley del Cajetón despertó a varios cabecillas del movimiento obrero que planean tomar el control de la Central General Autónoma de Trabajadores de Panamá (CGTP) del barrio de Perejil. Como dice el dicho: Plátano maduro no vuelve a verde.
Ironías de la vida. A los comandos jubilados que protestaban en la provincia de la Berraquera porque no les pagan la prima de antigüedad los reprimieron los propios tongos en servicio. En la vida real, ningún cura se acuerda cuando era sacristán.
Vuela alto. Se conoció la muerte de la coronel Matilde Torres, la primera mujer subdirectora de los bomberos en la historia de la institución. Durante los 22 años en el cuartel fue reconocida por su valentía y entrega al trabajo de salvar vidas. Paz a su alma.
Diplomas chimbos. Por los lados del West anda corriendo que en Miviot, la ATTT y el Ministerio Verde hay nombramientos con diplomas más falsos que un billete gringo de tres palos. Que la vaina va a explotar más duro que el escándalo de los profes en Meduca. ¡Ajoo!
Mercado persa. En los pasillos del Gustavo Nelson Collado las mises tienen un control férreo del negocio de buhonería. Ofrecen tamales, yuca, ñame y hasta rifas de jamones y pavos. Cuando ven a los vendedores externos le van echando la seguridad para ahuyentarlos del área. Berraquera.
Trato VIP. Dicen que en la cárcel de la tierra de Urracá los que tienen chenchén la pasan pritty, y amén de los permisos para trabajo, estudio y visitas especiales y hasta parquean en las oficinas administrativas. Y los que están en la lama, viven las de caín en ese encierro.
Bajo el agua. Me chatea un parroquiano que Pesé y Parita, en la provincia de la Berraquera, se inundaron por la falta de mantenimiento de las cunetas y puentes. Los tapa huecos, en vez de sudar, andan pensando en jamón y pavo.
Jugada monetaria. Sigue el juega vivo violento en ciertos hospitales con jefecitos que se ponen turnos para cubrirse las andanzas en la práctica privada, no atienden a los pacientes y solo hacen la papelería que debieron hacer en la mañana. Berracos.
Pa’l taburete. Después de tres extensos períodos, uno de los mosqueteros electorales se despide en diciembre de 2024. Y como si ya no fuera tanto tiempo, los manzanillos, corrijo, los asesores, le dicen que debe consolidar su legado. Todo tiene su final, nada dura para siempre.
Expulsada. La cosa sigue candela por la Udelas, corrió como pólvora la expulsión de la rectora electa en tiempos de pandemia. La resolución lleva la pata de gallina de la señora que dejó el Santo sentada en el trono universitario.
Cuenta pendiente. Resulta que a la gente de las Becas se le olvidó que el 24 va de salida y los pela’os becarios con discapacidad siguen sin ver un centavo. Y ahora más que nunca necesitan ese chenchén, porque las citas médicas no bajan de 90 palos y las terapias de 35. ¿Qué pasa ahí, Jaimito?
Afincando el diente. Como que la reforma a la ley del Cajetón despertó a varios cabecillas del movimiento obrero que planean tomar el control de la Central General Autónoma de Trabajadores de Panamá (CGTP) del barrio de Perejil. Como dice el dicho: Plátano maduro no vuelve a verde.
Ironías de la vida. A los comandos jubilados que protestaban en la provincia de la Berraquera porque no les pagan la prima de antigüedad los reprimieron los propios tongos en servicio. En la vida real, ningún cura se acuerda cuando era sacristán.
Vuela alto. Se conoció la muerte de la coronel Matilde Torres, la primera mujer subdirectora de los bomberos en la historia de la institución. Durante los 22 años en el cuartel fue reconocida por su valentía y entrega al trabajo de salvar vidas. Paz a su alma.
Diplomas chimbos. Por los lados del West anda corriendo que en Miviot, la ATTT y el Ministerio Verde hay nombramientos con diplomas más falsos que un billete gringo de tres palos. Que la vaina va a explotar más duro que el escándalo de los profes en Meduca. ¡Ajoo!
Mercado persa. En los pasillos del Gustavo Nelson Collado las mises tienen un control férreo del negocio de buhonería. Ofrecen tamales, yuca, ñame y hasta rifas de jamones y pavos. Cuando ven a los vendedores externos le van echando la seguridad para ahuyentarlos del área. Berraquera.
Trato VIP. Dicen que en la cárcel de la tierra de Urracá los que tienen chenchén la pasan pritty, y amén de los permisos para trabajo, estudio y visitas especiales y hasta parquean en las oficinas administrativas. Y los que están en la lama, viven las de caín en ese encierro.
Bajo el agua. Me chatea un parroquiano que Pesé y Parita, en la provincia de la Berraquera, se inundaron por la falta de mantenimiento de las cunetas y puentes. Los tapa huecos, en vez de sudar, andan pensando en jamón y pavo.