Los mitos del número 69

Pocas veces hablo de este día. Sé que en muchas partes del mundo es para recordar a los muertos, pero en mi caso se trata de cuando vine a la vida. Mi madre me dijo que aguantó el parto para que no se burlaran de mí, pero Dios decidió que naciera un día como hoy en 1955. ¡Sí señores, llego al número 69 y sobre este símbolo matemático se tejen leyendas! Hace muchos años hacía uso de mi derecho de portar la placa de prensa. Cuando fui a ver el número que me tocaba resulta que era la PR-69.

Mis lectores saben que el 69 se presta para interpretaciones y burlas. La rechacé y volví en otro momento. Así pude evadir ese número y en su lugar obtuve la placa PR-72. ¡Vaya número para jugar en la lotería... al revés y al derecho!

Al 69 se le asocia con una posición sexual y también con aquellas personas que han elegido tener relaciones con la gente de su mismo sexo. Por esas razones no quería que mis colegas periodistas me hicieran burla por ostentar la placa PR-69 en mi auto. Dicen que esa posición es conocida por su simbolismo de igualdad y reciprocidad en las relaciones íntimas. En el esoterismo se interpreta como un símbolo de armonía y equilibrio. Ya sea al revés o al derecho siempre observará el 69. Esta imagen simboliza la unidad y la integración de fuerzas opuestas en perfecto equilibrio.

Y si usted descompone los símbolos, el 6 se asocia con la armonía y el amor y la responsabilidad familiar, mientras que el 9 la compasión, espiritualidad y sabiduría. Juntos indican una combinación de cualidades humanitarias y espirituales, lo que sugiere un enfoque equilibrado, tanto hacia las relaciones personales como hacia el crecimiento espiritual.

El 69 se considera un símbolo de buena suerte y prosperidad. Se cree que su forma visual se asemeja a los caracteres chinos que significan “larga vida” y “riqueza”. Algunas personas utilizan el número 69 como un amuleto o talismán para atraer la fortuna y la prosperidad en sus vidas. Y ya no los canso más con este enredo numérico. Sé que hoy voy a recibir múltiples mensajes de felicitación de aquellos que, de forma natural, tienen la fecha agendada y de quienes lo harán luego de leer este refrito.

Abrazos y le doy gracias a Dios por permitirme estar en la antesala del piso 70. ¡Es un año más que he vivido con intensidad, y agradezco de antemano sus parabienes!