- martes 03 de abril de 2018 - 12:00 AM
ROMANOS 8:32 ‘...nos dará también con Él TODAS LAS COSAS?"
MI-SION: bien se puede resumir –porque son más- a sólo 3 pasos el proceso de selección de personal: necesidad de la empresa, análisis de hojas de vida y contratación. Usaré esta analogía, pero permítame ir de'atrás pálante- para explicarme mejor. Un contrato no es más que un pacto. Y nuestro Dios, es un Dios de pactos. Estamos en el pacto de la gracia, por ejemplo; fue firmado con la sangre de Jesús, según la Biblia. No hay remisión de pecados sin sangre y ya Él firmó ese contrato. ¿Lo has firmado tú? ¿Lo reconoces como tú único y suficiente Salvador o crees que necesitas otras ‘deidades' para llegar al Padre? La propia Palabra dice que Él es el único Salvador…no hay más abogad@ o redentor o redentora: ‘Nadie viene al Padre si no es por mí'. Y aquí entre tú y yo, nadie, es nadie …máxime si es el propio Dios el que lo está diciendo –a menos que digamos que Dios miente-. Una prueba bíblica más: cuando algunos quisieron adorar a Pablo (a quien llamaron Mercurio), Pedro y a Bernabé (a quien llamaron Júpiter), ellos se negaron a recibir tal veneración. A propósito, según la RAE: venerar significa dar a algo o alguien el lugar de Dios. Pasemos del contrato, a la hoja de vida. Cuando Juan el Bautista dudó, y mandó a preguntar a Jesús si era el Mesías, el Cristo le respondió: ‘?Vayan y cuéntenle a Juan lo que han visto y oído: Los ciegos ven, los cojos andan, los que tienen lepra son sanados, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncian las buenas nuevas'. Y los antecedentes, la hoja de vida, el backgroud de Dios contiene aún más: abrió el Mar Rojo, hizo brotar agua de la peña en el desierto, derribó murallas al son de trompetas, murió y resucitó, y más, mucho más.