El chocolate

Originario de Tabasco en México cuenta la leyenda que el dios Quetzalcoatl le regaló un árbol de cacao a los hombres unos 1500 años AC y ahí comenzó el problema de muchos: la adicción al chocolate: Realmente creo que la adicción es a todos los aditivos y preservantes que le ponen ahora, para colmo, mientras más barato menos chocolate tienen.

Científicamente se supone que cuando consumimos chocolate se liberan neurotransmisores llamados serotonina y endorfinas que están asociados con las sensaciones de felicidad y bienestar y es la euforia temporal, es por eso que luego de un tiempo queremos más y más chocolate.

Hay chocolates y chocolates. Esos que se compran por ahí casi no contienen cacao, pero si exceso de químicos, aceites, azucares y colorantes que solo sirven para abaratar costos y hacernos creer que estamos comiendo algo rico.

Ahora las pocas veces que compro chocolate invierto un buen par de dólares y adquiero orgánicos y o artesanales, así ingiero verdadero cacao y de paso ayudo a emprendedores y pequeñas empresas.

Con ese fin descubrí una cafetería en El Cangrejo que ofrece bebidas de chocolate frías o calientes que son una delicia y se une a mis choco-favoritos; la materia prima viene de Boquete y todo es artesanal.

Es increíble que ahora casi todo lo que comemos no es realmente lo que creemos que estamos comiendo, así que, si puede comprar y consumir productos de pequeños agricultores, fincas privadas o del patio de los abuelos le aconsejo que lo haga; así empecé a hacer con el queso. Ahora estoy segura que todos los días como queso de verdad.