- martes 17 de enero de 2023 - 10:52 AM
Un equipo de expertos llegó este martes a Katmandú para formar parte de la investigación del vuelo 691 de Yeti Airlines, que se estrelló el domingo pasado con 72 pasajeros a bordo justo antes de aterrizar sin dejar sobrevivientes.
El equipo de once investigadores está dirigido por Yann Torres, de la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil (BEA), una agencia del gobierno francés responsable de investigar accidentes aéreos.
Otros seis miembros del equipo son parte de la empresa franco-italiana ATR, fabricante del avión siniestrado, y un experto de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA).
Los investigadores partirán esta misma noche a la ciudad de Pokhara, donde ocurrió el accidente, acompañados por otro equipo nepalí de 11 miembros, cinco de ellos de una comisión formada por el Gobierno nepalí.
“Los expertos apoyarán al equipo de investigación de Nepal”, dijo a EFE el secretario del comité gubernamental, Buddhi Sagar Lamichane.
Según el también secretario adjunto del Ministerio de Aviación Civil de Nepal, los expertos ya han recibido las cajas negras del avión que contienen la grabación de voz de cabina (CVR) y el registro de datos de vuelo (FDR).
“Examinaremos el CVR en Katmandú, mientras que el FDR se debe enviar al extranjero ya que no tenemos las instalaciones para examinar la grabación aquí”, explicó Lamichhane.
Las autoridades aún no han decidido a qué país enviar la caja negra que contiene la información técnica del vuelo, aunque la fuente adelantó que "la primera opción sería Singapur”.
A partir de ahí, detalló, “los expertos extranjeros harán las recomendaciones de seguridad con base en lo que se conozca de esas investigaciones”.
Según las autoridades, hasta el momento se han recuperado los cuerpos de 71 de las 72 personas a bordo.
Este es el segundo accidente aéreo en Nepal en menos de un año, después de que el 29 de mayo un avión de la compañía Tara Air se estrelló en la localidad de Jomsom, y murieron las 22 personas personas que iban a bordo.
Esta cifra de siniestros ha llevado a Nepal a ser objeto de sanciones internacionales por la falta de controles, y la Unión Europea prohibió en 2013 el acceso de aerolíneas nepalíes en su territorio.
Desde noviembre de 1960, cuando se registró el primer accidente aéreo en el país, más de 900 personas han muerto en accidentes de este tipo, según las estadísticas del organismo de aviación civil de Nepal.