Sexo sin tabúes

C ada pareja tiene su propia danza, única en su especie, parecida a otras sólo en apariencia.
  • sábado 07 de mayo de 2011 - 12:00 AM

C ada pareja tiene su propia danza, única en su especie, parecida a otras sólo en apariencia.

Por eso es tan importante que los esposos, ante todo, se escuchen a sí mismos (sus deseos, necesidades y las reacciones de sus cuerpos) y luego, juntos, busquen las formas de expresar su amor, poniendo atención en las que los ayuden a consolidar el lazo conyugal, aquellas que les ofrezcan la mayor riqueza de las vivencias sexuales y que mejor se adapte a las expectativas de ambos.

Es difícil imaginarse un matrimonio feliz sin un diálogo sobre su vida erótica. De allí que la pareja debe informarse mutuamente sobre lo que les gusta y lo que no en la relación sexual.

El diálogo sobre temas íntimos a menudo suele estar entorpecido por las erradas creencias acerca de masculinidad y feminidad, las que sugieren que el varón siempre debe saber lo que brinda más placer a la mujer y esta debe esperar hasta que él caiga en cuenta de qué es lo que más le gusta.

Es necesario tratar la búsqueda de la relación sexual más satisfactoria para ambas partes, como el camino imprescindible en la conquista de la experiencia compartida en el arte de amar. Los errores y fracasos no pueden achacarse a lo moral, ya que en la comunicación está la clave del éxito de la vida en pareja.