- sábado 25 de octubre de 2025 - 12:00 AM
Jennifer Daniels, residente en Modesto, California, sintió la necesidad urgente de usar un baño público. El sitio más cerca que encontró fue una farmacia, donde entró corriendo. Al salir, ya aliviada, a manera de cortesía, decidió comprar algo antes de retirarse.
Lo que eligió fue un “raspadito” de lotería. ¿Y el resultado? ¡Se ganó cinco millones de dólares!
La máquina automática de lotería estaba justo al lado del baño. Ella metió un billete de 20 dólares, sacó un tícket del juego “Ultimate Riches”, lo escaneó y ante su vista apareció el milagro: boleto ganador con premio inmediato... ¡Tremendo golpe de suerte!
Al ser consultada sobre qué hará con todo ese dinero, Jennifer respondió: “Pagar las deudas de mis padres y garantizarles una vejez tranquila”. También dijo que terminaría de pagar su casa y planificará la educación universitaria de su hijo. Y aunque no renunció a su empleo, sí bajó la intensidad: pasó de trabajar seis días por semana a disfrutar más tiempo en familia.
La suerte es loca y a cualquiera le toca, y en cualquier lugar: incluso en medio de una urgencia por ir al baño.