- lunes 03 de marzo de 2025 - 12:00 AM
La noche del sábado, el silencio de la comunidad de La Pesa #1, en La Chorrera, se rompió con el sonido de sirenas. Un llamado desesperado difundido a través de las redes sociales, había alertado a las autoridades sobre un caso desgarrador de maltrato infantil. En el corazón de la oscuridad, un niño se encontraba atrapado, encadenado en una casa.
Los uniformados del Servicio Policial de Niñez, en coordinación con el Ministerio Público, llegaron a la escena y al ingresar al inmueble, los agentes encontraron al pequeño en condiciones deplorables: una cadena alrededor de su pierna, símbolo de un cautiverio que no solo era físico, sino también emocional. Y lo rescataron de ese sufrimiento.
Tras ser liberado, el menor fue llevado a un lugar seguro, donde podría comenzar su proceso de sanación.
La mañana del domingo, dos personas, un hombre y una mujer, presuntos responsables del maltrato, fueron detenidos y en las próximas horas serán llevados ante un juez de garantías para ser judicializados por este brutal delito.
Este caso no es aislado. A finales de enero, una madre fue detenida por maltratar a su hija menor. La madre, en su desesperación y rabia, utilizó la violencia como herramienta de control por el no pago del padre de la pensión alimenticia. Las grabaciones de sus amenazas y ataques se convirtieron en evidencia irrefutable de un hogar donde el amor fue reemplazado por el miedo.
Las autoridades competentes hicieron un llamado a la sociedad para que esté atenta y denuncie cualquier señal de maltrato, pues la historia de este niño que fue hallado encadenado es un recordatorio sombrío de que el abuso puede estar oculto tras puertas cerradas, y que a menudo, las víctimas son quienes menos pueden defenderse.