A Juan lo golpearon, amarraron y lo mataron de una puñalada en el cuello

A Juan David García González, de 16 años, sus familiares lo buscaban desesperadamente desde el 4 de octubre cuando desapareció en la Terminal de Transporte de Albrook.

Desde entonces Briceida González, su madre, hizo todo lo posible por encontrarlo. Sin embargo, la búsqueda no tuvo un final feliz. Tras 12 días de angustia su cuerpo sin vida fue ubicado la noche de este miércoles en avanzado estado de descomposición, amordazado, con las manos amarradas, golpeado y con una puñalada en el cuello, en el segundo piso de un edificio abandonado localizado en Curundú.

El hallazgo del cadáver de Juan, un joven con discapacidad auditiva, se produjo tras la captura de un menor de 15 años que confesó a los investigadores que había asesinado a Juan y dónde estaba su cadáver. El sospechoso será llevado a audiencia en las próximas horas.

De acuerdo a Briceida, su hijo estudiaba en un colegio especial ubicado en Avenida de La Paz y el viernes 4 de octubre el bus del colegio, como todos los días, lo dejó en Albrook, donde Juan tomaba el metro para dirigirse a su casa. Sin embargo, ese día Juan no llegó a su hogar, desapareció de forma misteriosa.

“Él siempre llegaba a casa entre las 6:30 de la tarde y 7:15 de la noche, pero ese día se estaba demorando mucho y llamé a su profesora y le pregunté si el bus del colegio había tenido retraso y me dijo que no”, dijo Briceida a El Siglo.

Con el paso de las horas y sin tener noticias de su hijo, Briceida salió a buscarlo por los alrededores del barrio sin ningún resultado. La madrugada del sábado interpuso la denuncia a la policía de menores y lo buscó en los hospitales.

Sin embargo, vio que la tarjeta de bus de su hijo tenía movimientos y le solicitó a la policía que investigara, pero no lo hicieron.

No fue hasta la tarde del lunes que un menor fue aprehendido saliendo del metro de Las Mañanitas con la tarjeta de Juan. El chico, que toda su vida ha vivido en Curundú, confesó que había asesinado a Juan. Cuando se le preguntó el móvil, no dijo nada y se desconoce por ahora las causas del asesinato.

“Maldad, fue pura maldad por lo que mataron a mi hijo”, alegó la madre dolida.

Briceida solo espera que se haga justicia y que tanto al menor detenido como a los que estén involucrados en el asesinato de su hijo les caiga todo el peso de la ley.

Briceida describió a su hijo como un niño alegre, divertido, estudioso y que amaba el fútbol. Su mayor pasión era jugar en una liga grande y era un fan del Barcelona.

“ Hace poco le dije que viajaríamos a los Estados Unidos, porque soñaba con conocer ese país”, dijo Briceida.

Instó a los padres a estar pendiente de sus hijos y quiénes son sus amistades, “porque hay mucha gente mala en las calles”.

La mujer dijo que la Policía Nacional hizo mal su trabajo, porque si hubieran seguido los movimientos de la tarjeta de su hijo y revisado las cámaras, quizá la historia hubiera sido distinta.

El abogado y criminólogo Vidal Pérez Escobar, opinó que la Alerta Amber solo se está aplicando de manera protocolar y no se está cumpliendo con los principios primordiales que requiere este tipo de alerta.

“Creo que prejuician en muchas ocasiones algunas autoridades del Ministerio Público y de la Policía Nacional y no responden de una forma elocuente”.

Dijo que esa respuesta tan tardía que se le dio a la madre de la víctima, no siguió una línea de investigación pronta, a pesar de que la víctima era un menor.

“No solamente la alerta Amber debe ser publicar la foto del menor y denunciar por los medios, sino deber integrarse a un equipo de trabajo integral donde se haga un perfil sicológico de la víctima y el hogar”, acotó el especialista.