Tres grupos no convencieron para convocar la Constituyente
- domingo 19 de diciembre de 2021 - 12:00 AM
Tres agrupaciones, el Movimiento Justicia Social, el Movimiento Panamá Decide y Firmo por Panamá, se trazaron la meta de recabar al menos 580.742 firmas.
El movimiento cívico para recabar firmas con la idea de convocar una Asamblea Constituyente en Panamá y renovar la institucionalidad del país fracasó, al solamente recolectar menos del 3 % de las rúbricas necesarias.
Tres agrupaciones -el Movimiento Justicia Social, el Movimiento Panamá Decide y Firmo por Panamá- se trazaron la meta de recabar al menos 580.742 firmas o el 20 % del padrón electoral para respaldar la elección de una Asamblea Constituyente Paralela, contemplada en la Constitución Política creada en 1972 en el régimen militar (1968-1989) y reformada en cuatro ocasiones, la última en 2004.
Esta iniciativa ciudadana buscaba el establecimiento de un nuevo acuerdo social que garantizara la separación de los tres poderes del Estado, lastrada por un desmedido presidencialismo y un Parlamento ausente de fiscalización. Estas razones de fondo nunca variaron y se mantuvieron como norte del movimiento, pero no le alcanzó.
Causas que malograron la iniciativa
La falta de claridad de sus impulsores, así como el "complicado y enrevesado" proceso establecido por las autoridades electorales son algunas de las causas que dieron al traste con la determinación de impulsar una Constituyente Paralela, dijo a Efe Carlos Ernesto González, fundador del Movimiento Panamá Decide.
La gente no entendió "por culpa nuestra que no lo hemos podido explicar bien, que esto era un ejercicio cívico, o sea, el ejercicio de un derecho constitucional, y no una votación ni (es) apoyar a nadie" políticamente, reconoció González.
La recolección de firmas era "sencillamente tomar ventaja de un derecho que da la Constitución, que prácticamente no se da en ningún otro lugar del mundo, y que permite que los propios ciudadanos llamen a una (Asamblea) Constituyente", afirmó González.
El abogado señaló que otro factor adverso "es el costo o lo complicado que es poder firmar", ya que "las opciones que da el Tribunal Electoral no son viables para recoger (cerca de) 600.000 firmas en seis meses".