Recorte de $400 millones agravará a los programas de Invalidez, Vejez y Muerte de la CSS

El posible recorte de 400 millones de dólares para la vigencia fiscal del año 2023 de la Caja de Seguro Social (CSS), fue rechazado ayer tanto por los miembros del Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (Conato) como por los dirigentes de los pacientes.

Guillermo Puga, de Conato, advirtió que al darse ese recorte incidirá en rebaja a las asignaciones en perjuicio de los tres programas de la CSS: Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), Enfermedad y Maternidad (EM) y Riesgos Profesionales, sobre el cual se propone una reducción de más de $180 millones.

Según los trabajadores, todos los sectores representados en la Junta Directiva de la CSS aprobaron un presupuesto para el 2023 de $6,580.7 millones, apenas suficientes para cubrir prestaciones económicas, tales como enfermedad, maternidad y riesgos profesionales

El gremio enfatiza que incluso, el recorte presupuestario podría agravar el programa IVM tomando en cuenta que el último Informe Actuarial con datos del 2020, pronostica que no habrá fondos para atender las pensiones al 2023.

Ante esta realidad, el dirigente de los pacientes, Alexander Pineda, considera que la CSS debe pedir una reconsideración a este recorte si el dinero no alcanza; porque esto será peligroso para la salud de los pacientes.

Solicitud

Por otro lado, el abogado y miembro de la Mesa del diálogo, Daniel Lombana presentó una solicitud formal al presidente Cortizo para que remueva de sus cargos a todos los miembros de la Junta Directiva de la Caja de Seguro Social (CSS), por incumplir con sus deberes.

Detalló que se necesita tener al frente de la institución gente que cumpla con lo que la ley le manda. ‘La dice que la junta directiva, una vez la junta técnica actuarial le presente su informe con las recomendaciones, tiene 90 días para ejecutar las soluciones, no es 90 días para llamar a una mesa para dilatar', aclaró el abogado.