Madres que celebran y madres que lloran
- jueves 08 de diciembre de 2022 - 12:11 AM
Este 8 de diciembre se celebra el Día de las Madres, en virtud de ese vínculo afectivo entre madres e hijos. Mientras algunas madres celebrarán su día, otras como Dalis Saldaña, madre de Aderlyn Llerena Saldaña lloran por la ausencia del fruto de sus entrañas.
Con sollozos y palabras interrumpidas por el sufrimiento a flor de piel, la madre de Aderlyn, la niña raptada en el sector de Las Trancas, el 13 de septiembre cuando llegaba a la Escuela Gabriel Lewis Galindo, dijo que este día es el peor de toda su vida.
‘Con el corazón en las manos y llena de dolor y sufrimiento, sin saber dónde está mi hija, [prorrumpe a llorar]. Le pido a Dios que me traiga a mi hija, porque estoy sufriendo todos los días que pasan, sin saber dónde está, que me de una noticia aunque sea', exclamó.
Dalis Saldaña pidió a las autoridades que ‘hagan lo posible por darle respuesta del paradero de su hija'.
Madres opinan
La profesora universitaria, Anayansi Turner declaró que como Dalis hay muchos casos en cuyos hogares no van a celebrar.
‘Creo que lo más que nosotros podemos hacer es acompañarla y exigir a las autoridades que se le haga justicia, contribuir a que la investigación se acelere y a la comunidad en la que ella vive, que colabore en cuanto a proporcionar información necesaria para que el caso no quede en la impunidad'.
Por su parte, Alicia Jiménez, presidenta de Fedecámaras, opinó que es muy lamentable la situación de Dalis pero la sociedad panameña está pendiente de ella.
‘Como madre que soy considero que el dolor indescriptible que puede sentir una madre, cuando ni siquiera sabe si su hija está viva o muerta o cuál es el destino que tomó, debe ser un dolor que yo honestamente no quisiera sentir nunca en mi vida y obviamente me solidarizo con el dolor de todas las madres, no solamente de Dalis, sino de aquellas que no saben al día de hoy el paradero de sus hijos', señala Jiménez.
Por último, la socióloga Lidia Obaldía envió un mensaje a todas las madres que luchan solas, realizando varios roles, sobre todo para llevar el sustento a sus hijos.
Hay una recompensa de $10 mil dólares para quien suministre información que ayude a localizar a la infante.