Guayabal: entre montañas, café y cultura originaria

Escondida entre montañas y neblina, la comunidad de Guayabal, región Kädri, distrito de Munä, corregimiento de Peña Blanca, en la Comarca Ngäbe-Buglé, guarda una historia rica en costumbres, tradición y trabajo agrícola.

Esta comunidad no solo cultiva café, sino también identidad y cultura. Con cada grano que cosechan y cada prenda que confeccionan, sus habitantes engrandecen al pueblo.

Por décadas, el esfuerzo colectivo ha sostenido una tradición cafetalera que ha impactado positivamente en la economía local y en la calidad de vida de sus pobladores.

Además del café, la comunidad también vive de la artesanía. Mujeres y jóvenes se dedican a la confección de naguas, chaquiras y otros productos tradicionales que reflejan la cultura Ngäbe. Estas actividades no solo generan ingresos, sino que ayudan a preservar la identidad de Guayabal. Así, entre cafetales y bordados, la comunidad mantiene viva su herencia y dignidad.

La producción de café arábigo se remonta a la década de 1960, cuando algunos pobladores trajeron la semilla a la comunidad. Ya para 1980, muchas familias cultivaban este rubro. Para comercializarlo, lo transportaban a caballo hasta Tolé, donde lo vendían a solo 25 centavos la libra.

En 1986, los señores Hilario Venado y Celestino Quintero organizaron a los productores y negociaron con el primer comprador: Plinio Ruiz. Para 1989, bajo el liderazgo de Quintero, se logró vender café a empresas de Santiago. Durante esa época, el producto era transportado a hombro y a caballo hasta la comunidad de Hato Chamí.

En 2021, el cultivo creció significativamente, y desde entonces, el café guayabeño ha ganado prestigio bajo el nombre Café de la Comarca. En 2025 alcanzó el mejor precio de su historia: 64 balboas por lata. El desarrollo productivo en Guayabal es cada vez más notorio, con diversos rubros que fortalecen su economía y reafirman su identidad.