David Rockefeller, el último de una generación de millonarios

- martes 21 de marzo de 2017 - 12:04 AM
PÉRDIDA
El último superviviente de toda una generación de Rockefellers y la cabeza visible de la familia durante las últimas décadas, David Rockefeller falleció a los 101 años de edad.
El multimillonario financiero y filántropo murió en su domicilio de Pocantico Hills, en Nueva York, tras una larga vida dedicada a los negocios, la promoción del capitalismo y el apoyo a las artes.
Rockefeller llevó con orgullo el estandarte de su familia y fue durante muchos años una de las figuras más influyentes del gran capitalismo estadounidense.
Con su muerte desaparece el último nieto vivo del fundador de la dinastía, John D. Rockefeller, que está aún considerado como el estadounidense más rico de todos los tiempos y como la persona más acaudalada de la historia moderna.
Profesionalmente, la carrera de David Rockefeller estuvo marcada por su paso por el Chase Manhattan Bank, una institución estrechamente vinculada a su familia y cuya expansión internacional lideró durante los años 70.
Rockefeller comenzó a trabajar para el banco en 1946, cuando al frente de este se encontraba su tío Winthrop W. Aldrich, y ascendió rápidamente, convirtiéndose en presidente en 1961 y en consejero delegado en 1969.
Utilizando su nombre y su carisma, multiplicó las operaciones de la entidad en el extranjero antes de dejar el cargo en 1981, aunque durante años continuó asesorando al banco en sus negocios internacionales y como una suerte de embajador.
Su afición a los viajes le convirtieron también en uno de los grandes representantes en el extranjero del gran capitalismo estadounidense, con continuas visitas a empresarios y líderes políticos en todos los continentes.
La revista Forbes le atribuía pocas horas antes de conocerse su muerte una fortuna de 3.300 millones de dólares, a pesar de las cuantiosas donaciones que llevó a cabo en sus últimos años.