Tamales se encarecen por costo de sus ingredientes
- jueves 03 de noviembre de 2016 - 12:00 AM
ECONOMÍA
Los que desean disfrutar de un delicioso tamal primero pegan un grito al cielo antes de sentarse a deleitarlo, pues para degustar de este plato típico se paga de dos dólares en adelante.
Lo que hace quejarse a los consumidores es que cada vez disminuye la cantidad de masa y el tamaño de la presa de este platillo.
Un tamal de dos dólares en adelante está elaborado con trozos de pollo, pero, si quiere una pieza completa, tendrá que desembolsar tres dólares o más.
El alto precio de los alimentos ha influido en su costo; por ello, quienes consideran que ofrecen un producto de calidad exigen ser remunerados de igual manera.
Tal es el caso de Vilma Morán de Trujillo, una tamalera que calculó el aumento de este delicioso producto en un 200%, si lo comparamos con el valor que mantuvo hace 5 años.
El maíz y la hoja de bijao, por ejemplo, aumentaron el precio de los deliciosos tamales, asegura la cocinera, quien vende el producto en tres hoteles del Panamá gracias a que salió escogida en una prueba de degustación y por la publicidad que realiza en por internet y Facebook bajo el nombre de Delicias Sra. Vilma.
A su juicio, todo se disparó desde el principio de año.
Según la tamalera, antes, la libra del grano estaba en 40 centavos, pero ahora está en 65 centavos.
Por otro lado, la docena de la hojas de bijao era comercializada a 40 centavos, cuando en la actualidad supera los 75 centavos.
Sin embargo, estos dos ingredientes no son los únicos que mantienen el descontento en los compradores que se quejan de los altos precios en que es vendido el producto, también están el hilo de madeja y los condimentos, los cuales reflejaron una variación de su costo a la alta.
‘Todo se ha disparado de precio este año, por eso prefiero ajustar el precio y garantizar el buen sabor, en lugar de que se pierda la calidad del tamal', dijo la experta en el platillo típico.
‘En tiempos buenos como diciembre, hago pedidos de 500 tamales dos veces a la semana. Para cumplir me apoyo en mis ayudantes a las cuales le pago de $30 a $35 dólares por pedido. Es un trabajo arduo; a veces trabajamos más de 12 horas', precisó.
Para completar los 500 tamales requiere invertir $125 en productos y $175 para los ayudantes. Luego de la faena, el cansancio y sus dividendos son lo que le quedan después de tanto esfuerzo.
‘Este trabajo es para el que le gusta, yo lo hago porque me siento bien cuando me dice la gente que quedó encantada con el producto', agregó.
Morán de Trujillo concluyó en que cada vez que un consumidor pruebe un tamal, debe tener en cuenta que detrás del producto terminado hay horas de molienda de maíz, desvelo, pero, sobretodo, un esfuerzo entregado para hacer un plato que ya pocos se dedican a preparar.