- miércoles 03 de julio de 2024 - 12:00 AM
Empecé a salir con un chico muy agradable y que me pareció encantador, me sentía muy enamorada pero un día que estábamos muy a gusto me dijo que era VIH. Sentí como si el mundo se me desplomara sobre la cabeza, él lo notó y me dijo que si quería que nos dejáramos de ver, pero en ese momento me sentí como una rata y le dije que no que yo le quería y que no me importaba. Pero no es verdad, me importa mucho, me da un miedo atroz y no sé como decírselo sin que se sienta dolido. Por eso he dicho que me da vergüenza, porque después de llenarme la boca diciendo que no hay que discriminar a nadie ahora me encuentro con que yo soy la primera en discriminar. Me siento fatal ¿Qué hago?
No tienes que tener vergüenza con tus sentimientos, ellos saben más que tú. Una cosa es no discriminar que quiere decir no tratar de otra manera, no dar de lado, no señalar con el dedo y otra muy distinta es elegir a la persona con la que quieres pasar toda la vida. Lo normal es que nuestra biología (en la que no tenemos ni arte ni parte conscientemente) nos empuje a elegir a personas sanas tanto física como psíquicamente, porque estamos eligiendo a alguien para compartir toda nuestra vida , alguien que nos acompañe en la vida y aunque si bien es verdad que nadie tiene la vida asegurada, el primer nivel de elección es el de la salud, por eso las personas que no parecen saludables no son atractivas, otra cosa muy distinta es cuando la enfermedad se presenta cuando los vínculos amorosos ya están establecidos. No puedes seguir con una persona que te da miedo, procura dejarlo con suavidad sin que se sienta herido, pero déjalo cuanto antes, nadie se merece que alguien este a su lado solo por lástima.
Existen ciertas dudas respecto al mundo sexual, despejo sus incógnitas con estas respuestas”.
