Se resistió al robo

Una llamada interrumpió el sueño de la familia Santamaría. Del otro lado del teléfono celular un vecino le informaba que Rodolfo Santama...
  • miércoles 15 de enero de 2014 - 12:00 AM

Una llamada interrumpió el sueño de la familia Santamaría. Del otro lado del teléfono celular un vecino le informaba que Rodolfo Santamaría Catuy había sido asesinado cuando iniciaba su jornada.

Eran las 4:30 de la madrugada cuando dos sujetos interceptaron al taxista de 55 años. El informe preliminar de la Policía dice que el taxista se resistió al robo, forcejeó con sus verdugos y lo mataron.

Se presume que eran dos los ladrones, los que le dispararon en dos ocasiones a la víctima. Uno de los tiros se alojó en el costado izquierdo del hombre, oriundo de la provincia de Colón.

La Policía encontró a Rodolfo con la puerta del vehículo abierta. Estaba recostado con una parte del cuerpo en el auto y la otra en el pavimento.

El crimen se perpetró frente a unos multifamiliares de Villa Lorena, en el corregimiento de Río Abajo.

El transportista residía en uno de los edificios. Cuando lo asesinaron se disponía a cumplir su jornada laboral que era de 5:00 de la mañana a 5:00 de la tarde.

Los delincuentes le robaron un celular y dinero. Se presume que no cargaba mucho efectivo, pues estaba por iniciar su jornada.

La llamada sobre la muerte de Rodolfo les marcó la vida a los familiares.

Yoselyn, una de las cuatro hijas de Rodolfo, expresó que la última vez que vio con vida a su padre fue a las 8:00 de la noche del lunes.

Ese día, Rodolfo llegó a la casa de sus hijas, en calle 7.ª, Pueblo Nuevo, y conversó varias horas con ellas.

Rodolfo era un hombre muy querido en Pueblo Nuevo, donde vivió gran parte de su vida. Sus familiares lo describieron como un hombre jocoso, a quien le encantaba relajear con todas las personas. Era alegre, amaba bailar congo y jugar basquetbol.

Hace 10 años, Rodolfo perdió a su esposa, aproximadamente el mismo tiempo que tenía de ser taxista y de haberse mudado solo a Villa Lorena.

Antes de laborar de taxista, Rodolfo trabajó como contador en el Ministerio de Obras Públicas.

La madrugada del lunes, el trabajador del volante se convirtió en el primer taxista asesinado en el 2014.

Su familia pide que se haga justicia, que las autoridades investiguen y arresten a los responsables.

Según estadísticas recientes de taxistas asesinados, en el 2013 mataron a 13 transportistas.