Misterio en Bocas: ¿Dónde están Ghussan y su hija?

Han transcurrido más de dos meses desde que el ciudadano canadiense Ghussan Zafar Labal y su hija de apenas 2 años, Nousaybah Bint Ghussan, desaparecieron sin dejar rastro en la provincia de Bocas del Toro, un caso que mantiene en vilo a la comunidad. A pesar de las intensas búsquedas iniciales, hoy día no hay rastros de ambos, y las interrogantes siguen aumentando.

La desaparición ocurrió el 21 de mayo, cuando Ghussan, quien presuntamente padece trastornos mentales, salió en la madrugada de su residencia ubicada en la barriada Mayor B, sector de El Empalme, llevándose consigo a Nousaybah y a su hijo menor, Salahuddin Musa Bint Ghussan, de tan solo 7 meses.

Los primeros reportes indicaban que el extranjero fue visto cerca del río Changuinola, lo que motivó a las autoridades a iniciar operativos de búsqueda por agua y tierra. No obstante, el 26 de mayo, residentes de la comunidad de Bella Vista, corregimiento de La Gloria, aseguraron haberlo visto solo, portando un machete, desplazándose por una zona montañosa y sin la compañía de sus hijos.

La Policía, Senafront, Bomberos y Sinaproc redoblaron las operaciones de búsqueda en este sector, sin resultados positivos.

Posteriormente se dio con el hallazgo del cuerpo sin vida del pequeño Salahuddin el 31 de mayo, a orillas del río Changuinola, en avanzado estado de descomposición y según algunos testigos con heridas en el cuello, aumentando el desconcierto y la urgencia de encontrar al padre y a la niña, pero aún continúan sin ser ubicados hasta ahora.

El propio procurador general de la Nación, Luis Carlos Gómez Rudy, confirmó que la unidad especializada de personas desaparecidas estuvo desplegada en Bocas del Toro realizando diligencias de campo en distintos puntos, pero enfatizó que la investigación sigue en curso.

“Esta es una investigación que continúa en curso porque de alguna manera hay que darle respuesta a los familiares sobre la no localización de dos de estas personas”, dijo Gómez Rudy.

A pesar de estos esfuerzos iniciales, moradores como Luis Palacios Salinas aseguran que no se observa presencia de estamentos de seguridad realizando búsquedas actualmente.

“Han transcurrido más de dos meses, el fiscal de personas desaparecidas se retiró de Bocas y aún es un misterio sin resolver”, manifestó Palacios Salinas.

Incluso, los familiares del canadiense ofrecieron una recompensa de mil dólares a quien proporcione información veraz sobre el paradero de Ghussan y su hija Nousaybah, sin que hasta la fecha se haya recibido una pista concreta.

El caso ha generado preocupación y tristeza en la comunidad, que exige a las autoridades no abandonar la búsqueda y brindar respuestas sobre este enigmático suceso que involucra a una menor de edad aún desaparecida.