‘Soy solicitada como un respaldo de credibilidad'
- lunes 27 de marzo de 2017 - 12:00 AM
ENTREVISTA
Ana Matilde Gómez es una de las más puntuales en la Asamblea. Dice que no le ofrecen nada a cambio de aprobar un proyecto, tal vez porque saben que con ella no va eso. Dice que si le ofrecen ser presidenta, lo pensará y tal vez acepte.
¿Qué es mejor, ser diputa o procuradora?
Son dos cosas distintas.
¿Pero qué le gusta más?
Si es cuestión de gustos, a mí me gusta tomar decisiones, impactar la vida de la gente. Los dos cargos dan para eso con la diferencia de que en una Asamblea hay que tratar de convencer a mucha gente más para lograr un cambio y pocas veces logras el apoyo en función del contenido y no de las conveniencias o preferencias particulares o afectaciones particulares.
¿Eso la hace sentir solitaria?
Impotente más bien.
Usted es la única independiente en la Asamblea, ¿eso es un problema a la hora de votar?
No, es un privilegio. Puedo tener libertad de acción sin una línea de partido, sin complacencias grupales o deudas y endosos de favores. Es una libertad plena de conciencia.
Pero también debe ser comprometedor cuando se trata de buscar mayorías...
Yo siento que más que cantidad soy solicitada como un respaldo de credibilidad.
¿Le ofrecen cosas o cómo manejan eso con usted?
No, no, no. A mí no.
¿Será que no se atreven?
Yo creo que pude dejar sentados mis principios, obviamente todos ellos comprenden –si no lo comprenden no importa–, saben que lo mío es argumentación y principios. Entonces, lo que me piden para que yo apoye, primero, tengo que haberlo leído; segundo, tengo que creer en ello y no es a cambio de ningún favor.
¿A usted le han ofrecido dinero por apoyar algún proyecto?
Nunca me han hecho una oferta de esa naturaleza.
¿En cambio, al resto sí les ofrecen?
Es lo que se habla ahí, pero yo no tengo ninguna evidencia de eso. De qué piden. Ellos mismos tratan de decirme lo que pasa, fulano de tal no da cambio a nada de nada, el otro saca provecho de cada cosa que apoya, pero no te dicen algo concreto. Uno les pregunta entonces: ‘Para qué cedes', y ellos responden: ‘Usted ya sabe cómo funciona esto, sino no se consigue nada', etc.
¿Tiene aspiraciones políticas?
Este puesto no era una meta en mi vida. No me he planteado alcanzar otro puesto político, pero hace como un año y medio que soy muy consciente de que yo he alcanzado un nivel de desarrollo político que yo misma no pensaba, así como un nivel de aceptación y creo que tengo una responsabilidad de estar preparada si las circunstancias se dieran como cuando corrí para diputada.
¿Y preparada para qué puesto?
Como para cualquier circunstancia que se abriera para mí y me permitiera tomar la decisión.
¿Cree que hay justicia selectiva?
Pero no por elección, sino porque no hay opción. Cuando se trata de un delincuente de cuello blanco, entre más poder económico tiene, más estructurado es su delito y limitadas son las posibilidades del sistema de enfrentarse a esa riqueza porque usted se encuentra con máquinas de escribir en el interior o un funcionario que tiene que escrutar una cuenta cifrada y no tiene una cuenta personal. Por eso es que se han creado algunas fiscalías especiales, porque el sistema no tiene capacidad instalada para enfrentarse al crimen en general. Es más fácil investigar un robo en un bus.
¿En su matrimonio es la estrella?
Yo diría que cada quien brilla en su momento. Es duro. La gran ventaja que tengo es que mi esposo tiene buenos niveles de autoestima y era un profesional ya realizado cuando esto llegó a nuestras vidas. Él ya ha podido alcanzar logros profesionales suficientes, nosotros no estamos compitiendo, estamos claros en el talento de cada cual, el tema de estar muy expuesta y tener que compartir el tiempo ya lo vivimos cuando fui procuradora, ahí tuvimos los ajustes y conflictos propios de cada pareja, yo hice mis concesiones, él hizo las de él, y nos ajustamos.