"He sentido frustración, tristeza, decepción", dice geriatra del Tzanetatos

La doctora Clarissa Botello del Hospital  Irma de Lourdes Tzanetatos en una carta abierta muestra su frustración y decepción, ya que el servicio de geriatría fue tachado de la lista para el grupo de vacunas que llegaron.

Este es su relato:

Con mucha honra a mi profesión de médico geriatra hago alusión a todos esos momentos en que me vi cara a cara con un paciente adulto mayor con diagnóstico de COVID. Les he atendido médicamente, dado de comer algunas veces, de beber, les he tomado de la mano, he llorado con y por ellos, en lecho de muerte. He dado RCP con poca protección por el apuro de asistir a tiempo a un paciente grave.

He sido víctima de discriminación cuando se han burlado de la edad del paciente para recibir en UCI. He manejado pacientes entubados, cuando no correspondía a mi profesión. He visto llorar a familiares, he visto el sufrimiento de frente en una gran medida, sin poder hacer mucho. He sentido miedo de quitarme la mascarilla para comer o tomar agua. He aguantado hambre, sed y sueño. Todo esto desde el día 1 de esta pandemia. He sentido frustración, tristeza, decepción y tal parece que aún debo seguir sintiéndome así.

Hoy el servicio de Geriatría del hospital en que trabajo: Hospital  Irma de Lourdes Tzanetatos, del corregimiento de la 24 de diciembre (uno de los epicentros de la pandemia) fue tachado de la lista o quizás fue considerado no primordial? No sé...Digamos...NO nos tomaron en cuenta para el grupo de vacunas que llegaron hoy.

Mi frustración ha aumentado! Que decepción!

Con todo lo que he vivido, no dudaría ni un  segundo en cederle mi puesto a las enfermeras, técnicos de enfermería y médicos generales de mi servicio que pasan más horas que yo en el hospital, trabajando turnos presenciales más prolongados y rotativos.

Espero sinceramente que cada uno de los que recibió una de las vacunas que llegaron a Panamá, se siente y analice si ha estado así de cerca al COVID. Porque yo, sinceramente, no podría sentarme en esa silla a recibirla, si estas enfermeras, técnicos y médicos de los que les hablo, no la han recibido primero.

La corrupción empieza en cada uno de los panameños! El juega vivo es realmente lamentable! Y espero nunca acostumbrarme a él.

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