Rescatan a 120 víctimas de la trata de personas

PÁRAMOS

El crimen organizado se las ingenia cada día más para obtener ganancias económicas explotando sexualmente a las víctimas de la trata de personas.

Este delito es el plato predilecto de los tratantes, pues buscan a mujeres y hombres para que vendan sus cuerpos al mejor postor.

Ricardo Mendoza, fiscal especializado en el delito de Trata de Personas del Ministerio Público (MP), informó que desde el 2016 hasta febrero de este año rescató a 120 personas atrapadas en esta espiral.

Explicó que de este cantidad, 85 fueron liberadas el año pasado en la ciudad de Panamá, de nacionalidades venezolana, colombiana, peruana y nicaragüense.

Mientras que en los dos primeros meses del año se logró liberar a 35 en Panamá Oeste.

En este operativo se aprehendió a dos colombianas y una dominicana, que se mantienen bajo investigación.

Dieciséis tratantes

El fiscal indicó que realizaron ocho investigaciones, en las que se capturó a 16 tratantes (tres panameños, tres ecuatorianos, tres colombianos y siete venezolanos).

De esta cifra, 15 se mantienen en los centros carcelarios y solo una fémina embarazada está bajo medida cautelar.

Dijo que estos casos se encuentran en los tribunales de la Corte Suprema de Justicia para llamamiento a juicio y solo se espera que se asigne la fecha para que el MP sustente la vista fiscal.

Mendoza recalcó que estas personas son engañadas en su propio país por los tratantes, quienes les ofrecen plazas de empleo y promesas debido a las crisis económicas que pueden estar confrontando y por situaciones políticas y de seguridad.

‘Por medio de la Interpol solo se ha conocido que algunas redes han trasladado a panameñas para ser explotadas sexual en otras naciones', expresó.

Rodrigo García, secretario nacional de la Comisión de Trata de Personas del Ministerio de Seguridad, explicó que a las víctimas (mujeres y hombres que en su mayoría son extranjeros) se les ofrece en los albergues la atención psicológica con los trabajadores sociales, alimentación, y se les ayuda a que superen los traumas que sufrieron durante el tiempo que fueron explotadas.

‘Se busca que cooperen con las investigaciones que realizan las autoridades judiciales y se dé con los responsables para que sean condenados', señaló.

El funcionario reiteró que no son repatriadas, si ellas no lo desean, ya que esto tiene que ser solicitado voluntariamente.