Presupuesto será de $14 mil millones

El presupuesto general del Estado para la vigencia fiscal 2012 estará por arriba de los 14 mil millones de dólares, anunció ayer el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Alberto Vallarino.

Esto significa que para el próximo año el Estado tendrá un aumento de mil millones de dólares más en el presupuesto, tomando en cuenta que para el 2011 fueron aprobados 13.9 mil millones de dólares.

Vallarino, aunque no especificó cuánto se destinará para funcionamiento y para inversión, señaló que se seguirá con los proyectos que quedaron pendientes en el Ministerio de Obras Públicas y el Ministerio de la Presidencia por las obras viales que se pretenden construir: los proyectos del Metro y la Cadena de Frío, así como la construcción de nuevos mercados.

A MANOS DE ‘CHELLO’ GÁLVEZ

El titular de la cartera indicó que se está terminando el proyecto y que una vez sea aprobado en Consejo de Gabinete pasará a la Comisión de Presupuesto de la Asamblea.

La aprobación de este histórico presupuesto estará en manos de Sergio ‘Chello’ Gálvez, quien ayer tomó posesión como nuevo presidente de la Comisión de Presupuesto de la Asamblea para el tercer periodo de sesiones.

Gálvez ha sido cuestionado por ser uno de los diputados con más ausencias dentro del hemiciclo y por tener pocas iniciativas legislativas.

El diputado de Cambio Democrático, uno de los que más ha arremetido contra sus aliados panameñistas, dijo que ahora que ha tomado el cargo dentro de la comisión prefiere no hablar de la alianza, pues ha tenido muchas diferencias por su sinceridad.

Ayer en su primera sesión, la Comisión de Presupuesto aprobó tres créditos adicionales y traslados de partidas por el orden de los $2 millones 791 mil 405 para el Instituto Panameño de Deportes, la Autoridad de Turismo de Panamá y la Autoridad Nacional para la Innovación Gubernamental.

El economista Juan Jované dijo que el Gobierno está comprometiendo las futuras generaciones, pues utiliza los fondos públicos para financiar infraestructuras que no aportan ningún ingreso al país con el objetivo de beneficiar a las grandes empresas.