ONU nombra a primera dama panameña como embajadora de la paz
- martes 05 de febrero de 2019 - 7:44 PM
La primera dama de Panamá, Lorena Castillo, fue nombrada como "embajadora de la paz" por la Asociación de Mujeres por la Paz de la ONU, por el cual ahora su objetivo será prevenir la violencia contra las mujeres y las niñas, informó este martes una fuente oficial.
"Me siento honrada por la distinción y agradezco a la Asociación de Mujeres por la Paz, por su confianza, y por la oportunidad de ser esa voz para las mujeres de impulsar y promover el respeto, la equidad, la inclusión y la paz", expresó Castillo al recibir el reconocimiento.
En marzo pasado, la misma organización galardonó el trabajo de la primera dama por su liderazgo en la región en la promoción de los derechos humanos y el empoderamiento de las mujeres, por lo que le otorgó el Premio Liderazgo 2018.
Con la designación de embajadora de la paz, Castillo se une a la princesa Camilla de Borbon Dos Sicilias, la Duquesa de Castro; Bushra Khayat; al empresario estadounidense Ronald Lauder; y al mexicano Eugenio López Alonso, quienes conforman el grupo de Embajadores para la Paz de esta asociación.
La panameña también ostenta otras distinciones como Embajadora Especial de Onusida para América Latina y portavoz mundial del movimiento Cero Discriminación.
La Asociación de Mujeres por la Paz -fundada en 2008 bajo el patrocinio de la señora Ban Soon-taek, esposa del exsecretario General de la ONU Ban Ki-moon- busca promover y avanzar en los objetivos de las agencias de la ONU que proveen oportunidades para mujeres a través de programas sociales, culturales, de educación y de empoderamiento, bajo la bandera de un proceso global de paz.
Esta asociación está comprometida con la prevención de la violencia contra las mujeres y niñas, con la prestación de servicios a las personas afectadas por la violencia, con el fortalecimiento de la aplicación de leyes y políticas contra la violencia, y con el empoderamiento de las mujeres en los países y las sociedades menos favorecidas.
La ONU estima que hay unas 60 millones de niñas sin acceso a la educación, lo que inhibe su habilidad para aprender y tomar decisiones.