Las lecciones de un doble asesinato

¿Quién es Kenneth Darlington? Eso pregunté en la clase de Ética y Deontología en la Facultad de Comunicación Social de la Universidad de Panamá. Es una de las pocas veces en que los estudiantes contestan a coro con una respuesta correcta. Este norteamericano de 77 años, abogado y con residencia en Paitilla fue la persona que disparó en contra de dos ciudadanos que protestaban bloqueando el tránsito en la Interamericana a la altura de quesos Mili. Hace un par de días fue condenado a 48 años de prisión por el doble asesinato y la posesión ilegal de armas. Con los años que tiene la sentencia pareciera una cadena perpetua. Si cumple la pena al final tendría 125 años y ya para ese tiempo, por condiciones naturales de la vida, estaría muerto. En 2005 fue llevado a los tribunales por posesión ilegal de armas. En aquel tiempo fue condenado a 32 meses de prisión, pero luego fue absuelto. Antes de asesinar a las dos personas Darlington intentó despejar las vías con la frase de: “Esto termina aquí.”

¿Qué lecciones nos deja este suceso? No pretendo justificar la muerte de estos dos protestantes, mas, el cierre ilegal e irresponsable de esa vía importante colmó la paciencia de muchos. Sé de personas que murieron por paros cardíacos y otras enfermedades y no me queda duda alguna que los motivos fueron por no poder llegar a los centros médicos. En esto tiene responsabilidad mayúscula el gobierno del presidente Cortizo que permitió estos hechos donde algunos terminaron en actos vandálicos en contra de la propiedad. La Constitución habla del libre tránsito y también los deberes y derechos de quienes dirigen a la nación. El mirar para otro lado fue una irresponsabilidad. También critico la acción de una dama quien, pese a que Darlington estaba armado y en una actitud desafiante, gritaba... ¡Anda, dispara...dispara!”

Después de esos sucesos lamentables quedan tres familias destruidas... las de los dos docentes muertos y la del asesino. Siempre hablo en el aula de clases sobre la importancia de administrar bien las emociones. ¿De qué sirven las lamentaciones ahora si los resultados están allí... a la vista? Dos personas están enterradas y una encerrada. La acción criminal de Kenneth Darlington no solo se debe mirar por el resultado doloroso, también se tienen que evaluar las causas y la irresponsabilidad de un gobierno que no actuó. Allí tuvimos la diferencia cuando se enfermó el dirigente de la comarca Toribio García. Ese día pudo ser trasladado hacia un hospital de Veraguas sin complicación alguna... las calles estaban despejadas. Hoy, me duele la pérdida de esas dos vidas y la forma en cómo se desgració el resto de su existencia un anciano que no supo administrar las emociones... Abrazos y que Dios nos bendiga a todos.