Experto propone revisar la política nacional de humedales en Panamá
- lunes 29 de julio de 2024 - 12:00 AM
Panamá tiene dos retos principales en la preservación de sus manglares: lograr un beneficio de los servicios ambientales y económicos de este ecosistema, sin degradarlo.
Osvaldo Jordán, especialista en política ambiental y derechos humanos, advirtió que aunque han habido experiencias exitosas en restauración de manglares, las cuales, han sido por iniciativa de organizaciones, en Panamá no está funcionando la política nacional de humedales que implementó el Gobierno en 2018.
“Hay que volver a ese documento y empezar a implementarla, por ejemplo, el inventario nacional de humedales, si tú no sabes lo que tienes, no lo puedes cuidar. El inventario está incompleto y desactualizado”, remarcó Jordán.
El experto recordó que “los manglares son en gran medida como un escudo que evitan las inundaciones y que tenemos que protegerlos”.
Panamá tiene aproximadamente 170.000 hectáreas de manglares en sus dos costas, pero con un porcentaje mayor en las del Pacífico por las condiciones geomorfológicas y geológicas del país, han señalado especialistas en humedales costeros.
Con una variedad de doce especies diferentes de mangle en sus costas del Atlántico y el Pacífico de un total de más de 60 conocidas en el continente americano, Panamá es considerado como el país con más extensión de manglares en Centroamérica.
Los servicios ambientales de los humedales y manglares son fundamentales en particular en todo lo que tiene que ver con la protección de la línea costera y en controlar la contaminación.
En el caso de Panamá, un país con un desarrollo más cargado hacia las costas, los manglares ayudan a controlar la expansión de esa “huella ecológica”.
Al respecto, Jordán resaltó que “al entender que ecosistemas como los manglares ofrecen servicios ambientales para el bienestar de toda la sociedad se abren inmediatamente nuevas posibilidades que los países han ido aprovechando progresivamente”.