El desafío del manejo de ambientes interiores en sitios de interés patrimonial
- martes 24 de diciembre de 2024 - 12:00 AM
Los inmuebles declarados de interés patrimonial son tesoros arquitectónicos y culturales que representan nuestra historia, valores y la unicidad de una comunidad. Mantener estos bienes va más allá de conservar sus estructuras y las fachadas, es también asegurar que los ambientes interiores potencien su importancia histórica y se integren coherentemente a la vida contemporánea.
Actualmente, la disciplina de la Restauración Arquitectónica apunta hacia la especialización de profesionales con conocimientos específicos más complejos como: restauradores de muebles, textiles, especialistas en iluminación, curadores de obras de arte, coleccionistas y perito de antigüedades, etc.
En este contexto, la labor del arquitecto interior especialista en conservación del patrimonio es fundamental, porque funciona como un enlace entre los procesos de la restauración y la integración del diseño actual, puesto que su formación, experiencia en la construcción, la visión estética, el dominio de la historia del arte, artes gráficas y una amplia cultura le permite analizar el contexto histórico del bien e interpretarlo de manera coherente para desarrollar propuestas que respeten el juego dialéctico entre el pasado y el presente.
El interiorista puede apoyar al grupo multidisciplinario de la obra de intervención y sugerir las prácticas restrospectivas aptas para de la disciplina de la Restauración (los re-restaurar, rehabilitar) poner al bien en sus óptimas condiciones para las funciones actuales, refuncionalización, reutilización “operación más paradójica, audaz y difícil de valorización patrimonial, puesto que consiste en reintroducir un bien en un circuito de los usos vivos, tal como lo planteaba Riegl y Giovannonni donde la repristinación elude el desuso y el olvido” (Choay, F. 2007).
Aunque también, está capacitado para tomar las decisiones de eliminar los elementos discordantes carentes de valor, hasta realizar propuestas del nuevo mobiliario cónsono con el original para lograr un eclecticismo armónico al combinar estilos de muebles disímiles conforme a las épocas, texturas y tapices.
La integración de accesorios modernos de calidad en un mismo espacio es un punto importante que no puede fallar, pues para ello deberá utilizar a las técnicas del interiorismo, tales como: equilibrio -para no sobrecargar el espacio-, el punto focal –que consiste en destacar un elemento visual, preferiblemente histórico del cual se definen y se distribuyen todos los demás elementos del espacio, ya sean muebles, revestimientos u objetos decorativos-, uso de la psicología del color –para crear armonía visual y sensación de bienestar-, domótica- para incrementar espacios seguros, climatizados, juego de luces, accesibilidad universal y el conocimiento de las normativas nacionales e internacionales para la conservación de monumentos y sitios históricos.
La República de Panamá posee un repertorio edilicio representativo, algunos declarados de interés histórico y otros en lista de espera como: la arquitectura canalera, patrimonio vernáculo (pueblos originarios), la caribeña (Bocas del Toro), y el eclecticismo. Por lo tanto, será imprescindible que el arquitecto de interior comprenda las teorías de conservación para intervenir en la dermis del corpus edilicio respetando la dignidad de las técnicas tradicionales.