- jueves 10 de julio de 2025 - 7:30 AM
La donación de 144 mil condones y 5,000 lubricantes realizada por el Fondo de Población de las Naciones Unidas en Panamá (UNFPA), en conjunto con el Ministerio de Salud (Minsa) para prevenir embarazos en adolescentes, continúa generando polémica en el país.
Las reacciones, tanto a favor como en contra, no se hicieron esperar, especialmente en redes sociales. El diputado Ernesto Cedeño se pronunció, señalando que “el país debe madurar y promover una educación sexual basada en principios”, haciendo énfasis en la “abstinencia sexual” como enfoque central.
Por su parte, el Movimiento Familiar Cristiano (MFC), vinculado a la Pastoral Familiar de la Iglesia Católica, calificó como lamentable que instituciones nacionales e internacionales crean que entregar preservativos a niños y jóvenes previene la promiscuidad y los embarazos tempranos.
Rutilio Pérez, presidente nacional del MFC, sostuvo que la familia debe ser la primera educadora en estos temas, apoyada por un sistema de salud pública eficiente que respete la dignidad humana. “Decisiones como esta incentivan el sexo libre sin control y perjudican el futuro de nuestros jóvenes, avaladas por instituciones estatales y organizaciones sin escrúpulos que atentan contra el patrimonio más valioso: la familia”, advirtió.
El gobierno informó que la donación se distribuirá principalmente en las provincias de Colón y Bocas del Toro. Edith Castillo, jefa de la oficina de UNFPA en Panamá, explicó que el personal de salud será el encargado de entregar los condones a niñas y adolescentes de áreas vulnerables.
Cabe destacar que Panamá pierde anualmente alrededor del 2% de su Producto Interno Bruto (PIB) debido al impacto del embarazo adolescente y la maternidad temprana, que en 2022 registró una tasa de 68.5 nacimientos por cada mil adolescentes.