- miércoles 18 de noviembre de 2020 - 12:00 AM
Los hombres singulares con frecuencia llevan íntimos ideales que, en el escrutinio de su vida, y en su convicción de su personalidad los ejecutan con sobriedad. En este caso muy particular impongo la tarea de exponer el temperamento y la vida de Demetrio H. Brid, quien nació el 21 de diciembre de 1859 en el antiguo Departamento de Panamá. Hijo del Dr. Federico Brid Chirino, cartagenero abogado del ferrocarril. Y Josefa Cayetado Lasso Paredes.
Atiende tareas en La Estrella de Panamá y con la adquisición de conocimientos ocupa el cargo de jefe de redacción entre 1872 y 1917. Este joven según uno de sus biógrafos nos dice: ‘Con gran ambición aprende paulatinamente todo lo relacionado con el manejo del diario. Entró en la empresa en calidad de repartidor de periódicos. Continuo como cajista. ‘Levantando plomo con el empeño paciente, silencioso y tenaz.' (Irvin Halman Revista Lotería p. 31)
Más compartía amenamente y su talento logró el balance entre el hombre y el literato cuando se le otorga la medalla Cervantes en civil reconocimiento. Es un hombre común y no pinto su existencias con detonantes simulaciones de gran benefactor en el turbión de su vida. Es como el escuchar la lírica de Hernández cuando canta: ‘Vengo de abajo. Mas hube / de comprender que es mejor / el árbol que hacía nube levanta su rama en flor.'
En calidad de Presidente del Consejo Municipal inaugura la Biblioteca Colón el 12. Ceñida la Paz de Wisconsin el 21 de noviembre de 1902, la esperanza para Brid, era la aprobación de Tratado Herrán Hay. El 4 de junio de 1903 con la participación de los concejales: Aizpuru, Arango, Arias Feraud, Arosemena,Chiari L. Cucalon, Brid, Lewis y Villarreal. La discusión el Alcalde se referia a las consecuencias de la guerra civil. Ante esa postura los concejales Lewis y Azpuru defendieron el Tratado Herrán Hay finalizando la sesión con el apoyo de tratado.
Los liberales hacen unión con los conservadores en Panamá y planifican la independencia. El 3 de noviembre de 1903, en calidad de Presidente del Consejo Municipal Demetrio H. Brid sustenta en sesión la independencia de Panamá de Colombia. Convirtiéndose en el Primer Presidente de Facto, por su atuación e los actos del Consejo Municipal el 3 y 4 de noviembre de 1903. Pero ni, el rechazo colombiano detuvo el suscrubir un decumento entre ellos: Eusebio A. Moral, Carlos A. Mendoza, Manuel Amador Guerrero, Domingo Díaz y José Papi Aizpuru lugarteniente de Victoriano Lorenzo.
Ante este déficit Brid, había logrado sus experiencia en 1892, en calidad de consejal y asume el cargo de Presidente el 29 de abril de ese año. La adscripción de Brid al Consejo municipal se repite del 21 de abril al 30 de diciembre de 1904. La llegada de los generales Tovar y Amaya con 500 efectivos militares desembarcan en Colón y ante las escaramusas de engños de impedir trasladar la tropa los generales caen en la celada.
Apresados Tovar y Amaya se aumenta la resurrección de insurgencia y con la llegada de barcos norteamericanos para cerrar el paso a su amigos colombianos.
El divorsio político era un hecho y la insurrección llevo a la sesión del 3 de noviembre de 1903. Y esclamó Demetrio H. Brid: ‘deseaba saber si…estaban dispuestos a adherirse y secundar ese movimiento'. Su existencia y accionar después de años se apobó la Ley 27 de 1 de diembre de 1953 y lo recocen como Presidente de Facto. Y antes por Decreto 93 del 27 de mayo de 1917, se decreta su muerte por Ramón M. Valdes. Entre otros reconocimientos el Consejo Municipal reconoció el hecho de la participación de Brid en la independencia y por resolución N° 119 del 29 de noviembre de 1967 ‘se reconoció su gesta en la independencia'.
Abundan los testimonios tales como el de 25 de marzo de 1903, por el cual se designa el Palacio Municipal Demetrio H. Brid. Y en la Resolución N° 123 de 6 de julio se ordena la colocación del medallón de Demetrio H. Brid en la Presidencia.
¿Cuál era la legitimidad de Colombia en Panamá y cuál era su control en el Istmo.? Hasta el general Huertas había cambiado de tolda y el ponderoso Coronel Eliseo Torres que se encontraba en Colón con 500 soldados. Que gritaba salvar la patria colombiana y fusilar a los traidores se le ofreció una buena suma de pesos y lleno sus bolsillos dejaron a los generales Tovar y Amaya capturados. Que glorioso honor militar.
Para el epilogo no creo que queden dudas, o quizás muchas ya que si hubo actos de gobierno que gestaron en el nuevo Estado. Maniatado o cercenado el nuevo Estado, no se me entienda que lo justifico.
