Hoy celebran los 112 años de la fundación de Nuevo Emperador

Este domingo, don Dionisio “Nicho” Gordón, con mucha alegría celebra (a sus 93 años) los 112 años de fundación de su amado Corregimiento de Nuevo Emperador, el cual se organizó un 2 de enero del año 1910, en el distrito de Arraiján

Este corregimiento, con su clima tropical, se ha convertido en guardián de la cuenca hidrográfica del Canal de Panamá.   Y es también la tierra del saril, achiote, yuca, maíz, arroz, pepino, entre otros productos que se cultivan en los huertos caseros y en las fincas agroforestales creadas hace más de 30 años a las faldas del Canal de Panamá.

Tal como lo cantara el poeta panameño Carlos Chamarín en uno de sus versos: “Quiero sembrar un maíz en la zona del Canal. Y sobre el verde arrozal, la saloma más feliz. He de escuchar la perdiz, allá en la curva lejana, y encima de la montaña, clavaré la enseña mía, y, flor de soberanía, que rescataré mañana”.

En la actualidad, en Nuevo Emperador “la agricultura sigue siendo una actividad que representa el sustento de  familias, y que provee de alimento a la comunidad, donde el hombre y la mujer del campo disfrutan de los frutos de la tierra canalera”, expresó la profesora Yaneth Samaniego, quien es socia hace más de 10 años de la FAS de Espiga Dorada.

Los cimientos de Nuevo Emperador

A solo 7 años del nacimiento de nuestra República,  la comunidad de  Paja, cambiaba su nombre  a Nuevo Emperador, abriendo paso al inicio de una nueva etapa, con aquellos visionarios que procedían  de comunidades como Emperador, Gatún, Gorgona, Carabalí, Cascada, entre otros pueblos que quedaron bajo las aguas del Canal.

Con Esperanza y perseverancia, los moradores de la región se abrieron paso para construir nuevos sueños, llegaron a un lugar donde había una mancha de paja, de allí el origen del nombre de este pintoresco lugar,  donde Eduardo Vaez  hizo que por muchos años su finca fuera encuentro de los bailes de Congo.

Hoy en la finca de Vaez está  la iglesia de piedra, con su santo San José, conocida como la Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores.  Participaron en su  construcción  don Pedro Cedeño, Milán Cedeño, Dionicio Gordón y Pilar Gómez.

Sus primeros pobladores, en su mayoría antillanos, españoles, chinos y colombianos, demuestran el crisol de razas que la compone.

Mujeres como Lorenza Smith, esposa de  don Manolo Smith, impulsaron la construcción del Centro de Salud de Nuevo Emperador. La Escuela se ubicaba donde hoy está la Casa del Deportista… queda en la memoria el recuerdo de maestros pioneros como “Cholo” Bethancourt, Magdalena Monterrey, María La Torre, Ida Ávila Barranco; las maestras  Coba y Tomasa; Tomás Concepción, Raquel de Zúñiga, entre otros.

Fue durante la gestión de la representante Juana De Lañas que se construyó el Hogar de las Amas de Casa, que después albergó al CEFACEI, y ahora es el puesto temporal de Salud de Nuevo Emperador.

Sitio de conexión

Nuevo Emperador también es camino de paso. Allí pastaban los animales de carga que llegaban de La Chorrera, Río Congo  y  de la ciudad capital.

Un pueblo de paso y parada obligada, por lo que comerciantes y transportistas vieron en estos oficios la mejor decisión para encaminar el progreso del corregimiento.

Entre los primeros transportistas se puede recordar a Emilio Miranda, con su chiva “La Condesa”, Roberto Gordón, Antonio  Miranda, Tomás Lee, Eusebio Lee…  tiempos aquellos en que la ruta de viaja pasaba por la  zona del Canal, conocida como la carretera vieja, que salía a la comunidad de Pedro Miguel, se podía pasar las esclusas caminando y llegar donde Madama Julia,  quien vendía comida y legumbres… hoy siguen manteniendo este legado de transportista  la familia Magallón.

Hijos meritorios

De este corregimiento   han salido grandes personajes, entre los cuales se destacan nombres como  el del educador Alfredo Cantón,  nacido en Nuevo Emperador el 6 de septiembre de 1910. Fue un escritor y pedagogo panameño, ganador de premios y reconocimientos nacionales e internacionales.

Otros destacados hijos de esta tierra son Julia Yip, enfermera;  Amable Gordón,  periodista e impulsador del deporte.

Testimonios como los de Ángel Rutilio  Gutiérrez, quien recuerda las fiestas patronales  del 19 de marzo. Se realizaban procesiones, bailes, cabalgatas, palo encebao, en medio de sus hermosas casas de madera, techo de cinc y sabor  caribeño, que  aún se puede encontrar  en Nuevo Emperador.

Es probable que la tipología de estas casas evoque —bajo el imaginario de los antiguos habitantes de los pueblos desaparecidos — la lucha por conservar su historia.

Un pueblo bendecido

Quienes visitan este corregimiento pueden encontrarse con una misionera incansable de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, la señora Elsa de Miranda, quien a sus 92 años, visita los hogares de la comunidad llevando un mensaje de fe, consuelo, esperanza y amor al prójimo.

Este también es un pueblo bendecido porque existe la diversidad religiosa.

Si visitas esta comunidad, comprobarás que aún conserva su entorno natural, rural y esa arquitectura que es parte de su encanto.  La conforman varias familias lo que hace que se conserve el sentido de calor de hogar y seguridad.

Estos tres moradores longevos de la comunidad son testigos de un pueblo en desarrollo con comercio activo, escuelas, tiendas de abarrotes, barriadas, iglesias, bancos, gasolineras, plazas comerciales e iglesias.

Sin embargo, las autoridades locales solicitan la aprobación del presupuesto para construcción del Centro de Salud, que es una necesidad urgente.

Una nueva generación de moradores de Nuevo Emperador sigue progresando profesionalmente, pero a la vez preservando  la esencia, raíces y recursos de esta comunidad.