De aventura con los pequeños de la casa

Si eres de los que piensan que viajar con niños pequeños es imposible o un problema, te equivocas. Aunque hay que tener el doble de precaución y llevar cosas adicionales, se puede hacer y además, es divertido.

Hoy te daré algunas sugerencias que me han funcionado al ir de campamento con mi hija de 3 años (aunque ella acampa desde antes de los 2).

Lo primero es decidir el sitio adecuado. En Panamá podemos optar por La Laguna de San Carlos, La Yeguada, el área de camping de los Picachos de Olá, Paraíso Escondido en Chicá o alguna playa tranquila como La Huerta o Puerto Francés en Colón o Mariabé en Los Santos. Éstos son sitios económicos, tranquilos y agradables para un buen campamento con tus pequeños.

Segundo, lleva suficiente agua. La necesitas para beber, lavarse los dientes, y cocinar si decides hacerlo. En algunos sitios como La Laguna de San Carlos o Paraíso Escondido tienen agua potable y baños con sanitario y duchas. Aún así, lleva la suficiente para que estén hidratados, especialmente en verano. Y hablando de cocinar. Muchos optan por encender fogatas. Allí podrás hacer un buen asado y disfrutar de la experiencia. En lo personal, utilizo una estufa de camping por practicidad y rapidez.

Para la comida, algo rápido y sin complicaciones puede ser la carne deshidratada, sopa china, pan tostado, salchichitas listas para comer, tuna, tortillas estilo quesadilla sólo de calentar, queso líquido y por favor, lleva frutas como bananos, mandarinas y manzanas.

No olvides las galletas de sal, jugos y cosas de picar. También leche tetrapack, cereal y no dejes de llevar chocolate para tomarlo caliente por la mañana. Dependiendo de a dónde vayas, siempre tienes la opción de cocinar en tu casa algo más elaborado y llevarlo. Al final, solo tú conoces lo que tus hijos pueden o no comer.

Y para la joya del camping: la dormida. Utilizar colchones inflables es cómodo, sólo ten en cuenta que algunos pesan más que una bolsa de dormir y tienes que invertir tiempo en inflarlos.

La bolsa de dormir es práctica, lista para usar, aunque algunas, especialmente las económicas, son bastante delgadas. En ese caso, te recomiendo llevar un mat (una colchoneta delgada que algunos usan para hacer yoga). Su peso es mínimo y bien enrollado lo puedes ubicar muy bien en una mochila. El mat lo colocas debajo de la bolsa de dormir y además de ser cómodo, aísla el frío de la tierra.

Y si son de los que no pueden dormir sin almohadas, puedes encontrar inflables a precio económico de 2 dólares. Existen tiendas de campaña de todos los tamaños, formas y colores. Encuentra una que se ajuste a la cantidad de personas y además, si pretendes acampar con cierta regularidad, compra una buena tienda.

Las que son muy baratas probablemente no te resistan una brisa demasiado fuerte o puede que haya condensación si llueve. Mantén siempre cerrada la tienda con su malla para evitar que entren bichos.

Además, no olvides las linternas con batería, cargador portátil, bloqueador solar, fósforos o encendedor, la ropa estrictamente necesaria (van de camping, no de pasarela), navaja, bolsas de basura.

Dependiendo si acampas en la playa, ropa de baño y flotadores, de ser necesario. Recuerda llevarles cosas para que se entretengan.

Al final, lo importante es que la pasen bien y sea una experiencia que recuerden siempre.