- jueves 02 de febrero de 2017 - 12:00 AM
No soy xenofóbico, soy panameño
Algunos lo vimos venir y lo anunciamos, otros aún no lo ven, pero llegó. Los ‘bobolándicos' nos hacemos los ciegos o no queremos ver, mientras quienes gobiernan pertrechan.
No soy xenofóbico, soy panameño, pero ya la situación es insoportable. Nos obligan a compartir nuestros escasos recursos (salud, empleo, trabajos informales, etc.), con extranjeros. Quizás el único país del mundo donde los foráneos tienen privilegios y más oportunidades que muchos nacionales.
Estamos obligados a pagar impuestos, no así muchos de ellos, porque trabajan fuera de planilla (por falta de papeles o permisos de trabajo) con empresas extranjeras. Muchos evaden impuestos y cuotas patronales. Además, pudieran estar cobrando menos del salario correspondiente. ¿Qué hace Migración, MITRAB y la CSS?
Al parecer, al igual que la administración anterior, la actual pudiera beneficiarse con algún negociado, porque a trastiendas se mantiene el ingreso de extranjeros indocumentados.
Se observa en calles o semáforos, chicas de tremendo cuerpo, en ropaje provocativo, repartiendo volantes o vendiendo agua, bebidas y quién sabe qué, pero no están solas, a distancia uno o más rufianes, terceros o proxenetas vigilan; pero las autoridades miran para otro lado.