• sábado 13 de agosto de 2022 - 12:00 AM

¿Usted lo entiende?

El pasado 1 de agosto la Junta Directiva de Tocumen, S.A., informó haber aprobado en el mes de marzo, o sea, hace cuatro meses

El pasado 1 de agosto la Junta Directiva de Tocumen, S.A., informó haber aprobado en el mes de marzo, o sea, hace cuatro meses, la resolución 030-JD-22, que autoriza a la administración para retirar del aeropuerto las aeronaves abandonadas y, muy detalladamente, explicó el procedimiento que se seguirá.

Motivado por la curiosidad, repasé el texto de la resolución y, como consecuencia, surgen varias preguntas que hago públicamente y que ojalá merecieran una adecuada reacción de la empresa pública que regenta Tocumen.

Primera: ¿Deben o no las aeronaves que usan el aeropuerto pagar arrendamiento o una tasa de servicio por usar sus instalaciones? Segunda: ¿Desde cuándo están ocupando espacios del aeropuerto, sin ser movidas, las aeronaves a las que se refiere la resolución de marras? Tercera: ¿Ignora la administración quienes son los dueños de esos aparatos fuera de servicio y abandonados? Cuarta: ¿Cuánto le ha costado a Tocumen, S.A., cuidar o, por lo menos, vigilar esas chatarras? Quinta: ¿Por qué en lugar del demorado y complicado procedimiento establecido para poder tomar acciones para la remoción de esos aparatos, no se opta por un proceso ejecutivo de lanzamiento, previo desahucio, en los términos usualmente aplicables en la vía comercial o civil? Sexta: ¿Podría Tocumen, S.A. aclarar cuánto es el tiempo estimado que tomaría el proceso descrito en la citada resolución para poder lograr deshacerse de esos aparatos? Séptima: ¿Qué multa se les impondrá a los propietarios para que Tocumen, S. A. pueda resarcirse de todos los ingresos perdidos y de los gastos en que todavía deberá incurrir para remover esas chatarras?

Seguramente a quienes leyeron la noticia también se les ocurrieron otras preguntas. Por lo pronto, haría bien la gerencia de Tocumen si respondiera a las anteriores.

Nota adicional: En Albrook hay otro cementerio de chatarras.

ABOGADO