Ultraje a la bandera nacional irrespetuosos

Todavía no me recupero del impacto e indignación de ver el ultraje e irrespeto a la Bandera Nacional que se dio en la mal denominada ‘marcha del orgullo gay' el fin de semana, porque ni es marcha, ya que es un jolgorio de desenfreno y abuso visual y ni mucho menos hay nada del porque sentirse orgulloso, a no ser que se tenga una afectación horrorosa y la autoestima por debajo del subsuelo. Y la indignación, no es porque sea el más patriota del país, sino porque mi familia y mis profesores cultivaron en mí el respeto como norma de convivencia y solemnidad a los símbolos patrios. ¿Pero qué se puede esperar de gente que reniega de la institución de la familia?

La pobre justificación dada por los voceros de esa comunidad gay no se las cree nadie porque ellos calculan cada acto y no es posible que se diga que ‘eran personas que iban a filmar una película'. Qué casualidad o es que somos ignorantes. Además de irrespetuosos, son mentirosos. En ese ultraje, participaron, diseñadores, productores, distribuidores de mi querida bandera manchada de colores que deslucen la pureza del tricolor nacional. De verdad que la ignorancia es atrevida y en este sector mucho más.

Nuestra historia registra los hechos del 8, 9 y 10 de enero de 1960 y que se originaron precisamente por un acto de irrespeto y ultraje a la bandera por parte de los antiguos ‘zonians' y hoy 57 años después un grupo de irrespetuosos sin conciencia histórica y abusivos de la tolerancia que la sociedad panameña le ofrece, vuelven a repetir este bochornoso acto en una plaza pública al mejor estilo del Coliseo Romano. ¿Hay alguna diferencia en el contenido entre los hechos de 1964 y los del fin de semana? Ninguna, los dos hieren el sentir nacional y de dignidad patriótica, pero dudo que esa gente sepa siquiera quien fue Ascanio Arosemena Y mi Gobierno.., calladito.

ANALISTA POLÍTICO