Tremendo recto de derecha al rostro

Pablo pueblo tendrá que seguir haciendo magia y deberá sacar fuerzas de flaqueza porque el acuerdo al que llegaron los tricolores, promotora que manda en el patio, en la cartilla para congelar la gasolina solo beneficiará a la cuadra del volante por la amenaza de un paro de guantes caídos.

Esta decisión le cayó como balde de agua fría a la afición, que está golpeada, por el ataque del virus que ha desencadenado una crisis económica, de la cual no sabemos cuando saldremos.

La fanaticada se siente al borde del nocaut, ya no sabe que hacer para evitar que la sigan conectando en el maltrecho bolsillo.

Son tiempos muy duros , un sector de Pablo pueblo se ha desbordado, recordemos lo que pasa en la costa atlántica, zona en la que siguen reclamando mejores días y se han librado intercambios de golpes al aire libre que en nada benefician a la recuperación de la economía en nuestra tierrita.

Los tricolores no han tenido suerte, les tocó volver a la cima del box local en los tiempos más duros de nuestra historia. Han recibido combinaciones de todo tipo, porque la afición se siente desesperada por la dura situación.