• martes 24 de marzo de 2015 - 12:00 AM

Todo lo que haga, hagánlo de corazón

Sin duda, la Hormiga trabajó con DILIGENCIA

Una de las fábulas más conocidas de Esopo es ‘LA CIGARRA Y LA HORMIGA’. ¿Su moraleja?: trabaja y aprovecha el tiempo, para tener cuando llegue el invierno. Ocurre que mientras la Hormiga trabajaba en verano, la Cigarra se burlaba, cantaba y la ‘cogía suave’. Pero, al llegar el invierno, la Hormiga disfrutaba la cosecha y la Cigarra…¡no tenía nada! Sin duda, la Hormiga trabajó con DILIGENCIA. Bien decía una amiga, con frecuencia: ‘hay que guardar pan pa’ mayo’. Pero, trabajar para tener en el presente y en el futuro requiere de PLANIFICACIÓN, invertir en lo que te representa ganancia, usar bien el tiempo. Bien dice la Escritura: ‘aprovecha bien el tiempo, porque los días son malos’. Para que estemos claros, el diccionario dice que DILIGENTE significa: ‘persona que pone mucho interés, esmero, rapidez y eficacia en la realización de un trabajo o en el cumplimento de una obligación o encargo’. ¡Decídete a actuar con DILIGENCIA! Desde temprano trabaja, cumple tus obligaciones o tareas –ya sea la más sencilla, o la más encumbrada-, con ‘mucho interés, esmero, rapidez y eficacia’. Escrito está: ‘todo lo que hagan, háganlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres…hagan todo sin murmuraciones y contiendas, para que sean íntegros e irreprensibles’. ¿Tú recompensa? Pues, ABUNDANCIA. Merece la pena ser DILIGENTE, ¿no? Entonces: ¡hagámoslo!