La Semana Santa

Para los cristianos, la Semana Santa, es la fiesta religiosa que recuerda los últimos momentos de Cristo en la Tierra: la pasión, la muerte y la resurrección; es decir, desde que llega a Jerusalén proclamado Salvador, hasta que es procesado, muerto, enterrado y resucita al tercer día.

En distintos países del mundo la conmemoran de diferentes normas, algunas idénticas a las panameñas, como son las procesiones, misas en horas distintas del día y la preparación de algunos platillos gastronómicos.

En Panamá y en ciertas comunidades, el Pan Bon, es típico de las familias afroantillanas, que según ellas, representa el pan que partió Jesús durante la última cena. No puede faltar los productos del mar en la mesa el pescado; la cocada con pepita de marañón; chicheme de maíz blanco, dulce de marañón, conserva de papaya, bollos de coco o dulce y empanadas preferiblemente de bacalao.

Pero, lo que representa esta Semana Santa, no solo debe quedarse en las tradiciones, que no son malas, sino, debe ir encaminado al aspecto espiritual de las personas. Tiempo de reflexionar que nos permita ese acercamiento con Dios, hacerse una autoevaluación sobre cómo nos estamos desempeñando, en la familia, trabajo y con el prójimo. Recordar los acontecimientos y las vicisitudes que tuvo que pasar Jesús para la redención de nuestros pecados.

Ojalá que este tiempo, sea aprovechado para hacer un giro de timón, en cuanto a las acciones que hacemos, que perjudican a los demás, dejar el odio, rencor, que de nada nos sirve.

PERIODISTA Y DOCENTE UNIVERSITARIO