- miércoles 08 de enero de 2025 - 10:26 AM
Se fue un artista, pero sus canciones están en millones de corazones
Me cuentan que nació en una familia muy humilde. Cuando su madre enfermó y necesitaba de tratamientos y medicinas el artista vendió lo que más quería para ayudarla. Se deshizo de su compañera fiel de seis cuerdas y con ese dinero ayudó a su madre. Tal vez su primera canción exitosa fue... “Mary es mi amor.” Fue escrita en 1965 y desde su lanzamiento se convirtió en la canción más solicitada en las radioemisoras.
Fue el himno musical de los latinoamericanos donde se refleja la inocencia de un adolescente buscando la felicidad. Marietta se llama la mujer que permaneció a su lado desde 1966. Fue un amor a primera vista.
La llama que se desató, después del primer encuentro, lo llevó a unir su vida a ella a tan solo 20 días de conocerla. Ella era reina de belleza, pues fue Miss Mar del Plata el mismo año del matrimonio. Cada momento vivido era una inspiración para este artista argentino, nacido en su Santiago querido. Esa ciudad también está reflejada en sus canciones. A no dudarlo México se convirtió en su segunda patria, país al que también le dedicó parte de su talento.
¡Sí señores, nuestro miércoles en positivo reseña la vida de Leopoldo Dante Tévez quien abandonó este mundo terrenal hace una semana! Mientras su familia se despedía del año 2024 él nos daba un hasta pronto. Leo Dan tenía una voz muy privilegiada.
Dicen que cuando salía al patio de su casa a cantar, cuando era niño, los vecinos abrían las ventanas para deleitarse con sus canciones. Es posible que haya sido uno de los compositores más prolíficos de habla hispana. Cuentan que le regaló al mundo más de mil canciones y existen otras tantas inéditas.
Le encantaba componer canciones para sus tres hijos. De ese matrimonio nacieron, Nicolás, Marian y Vanessa. Se nos fue el León de las Pampas, el hombre que acarició el Periodismo y la política cuando intentó ganar un puesto en su tierra natal. Lo hizo de manos del peronismo, pero pese a la fama, no pudo triunfar. Su esposa afirma que su voz y sus canciones eran tan profundas que las plantas las sentían.
Cada vez que salían al jardín de su casa cuando Leo cantaba las flores respondían. Hoy marcha hacia ese infinito desconocido. Leo Dan puede estar tranquilo pues sus canciones sonarán en cada rincón del corazón de su público. Abrazos Leo y gracias por esa fuerza e inspiración que nos diste a quienes nacimos en los 50, 60 y 70. En el camino te convenciste de que Jesús es nuestro pastor y a él sea toda la gloria.
La hipertensión y la diabetes no te permitieron seguir entre nosotros. Partiste a la casa de Dios a los 82 años. Parafraseando algunas de tus canciones puedo decirte que ¡tú sí llegaste en el momento en que más te esperábamos y a pesar de portarme mal te prometo que seguiré escuchando tus canciones. Ahora que estás en el cielo será más fácil darle la luna a quienes te la pidan. Hasta pronto mi amigo y Dios nos bendiga.