• lunes 15 de junio de 2015 - 12:00 AM

¿Qué piensas de ti mismo?

Sin embargo, el Ángel del Señor, al dirigirse a Gedeón, le llamó: ‘varón esforzado y valiente'

MI-SIÓN: una pequeña luciérnaga se negaba a salir a brillar. Su abuela, le preguntó el porqué. –‘Es que nunca podré brillar como la luna'-, contestó. Su abuela sonriendo le dijo: -‘la luna es inconstante; a veces desaparece, en ocasiones sólo asoma un retazo, y de vez en cuando parece que su brillo ocupa todo el cielo, pero: ni siquiera es ella, sino un reflejo del sol. Tú en cambio, puedes salir a brillar siempre...y como nadie'-.Entonces, ¡la luciérnaga se atrevió a salir y a brillar! Igual que la pequeña luciérnaga, Gedeón se describía a sí mismo, así: ‘(soy) el más insignificante de mi familia'. Sin embargo, el Ángel del Señor, al dirigirse a Gedeón, le llamó: ‘varón esforzado y valiente'. ¿Quién tenía la imagen equivocada de Gedeón? El desenlace de la vida de Gedeón lo dice todo: liberó Israel, ‘el país tuvo paz' y el Señor los ‘rescató del poder de todos los enemigos que los rodeaban'. ¿Cómo te ves tú ante los problemas que te rodean? ¡No importa! Lo que cuenta es que, cuando el Señor se refiere a ti, te llama: ‘más que vencedor, esforzad@ y valiente, luz del mundo'. Entonces, esta es la MI-SIÓN para hoy: sal valientemente a esforzarte, a alcanzar tu victoria, e igual que la luciérnaga -que se creía pequeña-, ‘no temas' y ¡atrévete a brillar siempre…y como nadie!

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