• viernes 24 de mayo de 2024 - 12:00 AM

Pendulando entre esperanza y desesperanza

El común del ser humano se inclina por esperanzarse. La población panameña vive esperanza ante el resultado de las elecciones de hace 18 días. Y más porque el día de la proclamación del presidente electo modificó el talante de su comunicación. De osco y tajante dibujó en el aire lo que la mayoría deseaba escuchar.

Pausado y sensato no mencionó dos temas que crean incertidumbre en parte de la ciudadanía. No mencionó al expresidente, al que prometió lo ayudaría en su situación judicial. Tampoco mencionó otro tema que pone aprensivo a buena parte de la ciudadanía. Ese tema, en la corta campaña que desarrolló, es que convocaría una Constituyente y, para alarmar más a los del poder constituido, que todo lo controlan y manipulan, le puso el calificativo de Originaria. Ignoró estos temas en su discurso al ser proclamado por la Junta Nacional de Escrutinio.

¿Será que no los mencionó porque los introducirá sin dar mayores explicaciones?

En lo referente a la “ayuda” al expresidente tiene poco espacio para maniobrar ya que solo podría darle el salvoconducto para que este abandone Panamá rumbo a Nicaragua o buscar que el juez de cumplimiento de la pena lo mande a casa por cárcel y, pasando un tiempo, le rebaja la pena por lo que haya cumplido. En su casa, estará más cómodo que en la embajada y tendrá más oportunidad de actuar en la política nacional.

Respecto a la Constituyente Originaria, no mencionándola, a la sombra, gana tiempo precioso para planificar hacer una a la medida del grupo de poder que ha estructurado, con seguidores fanáticos, con oportunistas y con los del poder económico que mayormente lo apoyaron, en los hay independientes y de todos los partidos.

Así las cosas, montaría la Constituyente que, ganando mayoría de los constituyentes, proporciones guardadas, sería como la sorpresa que montó la dictadura, montando una nueva constitución, a su medida, cuando solo era instalar una Asamblea de Representantes.

Los planes debe tenerlos y como ningún tigre se vuelve vegetariano, lo que viene es preocupante para el futuro de Panamá.

Habrá que organizarse y ganarle la constituyente para tener esperanzas.

Así las cosas, montaría la Constituyente que, ganando mayoría de los constituyentes, proporciones guardadas...
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