En el acto conmemorativo del 96 aniversario del nacimiento de Omar Torrijos Herrera, Guillermo Ríos Valdés, disertó sobre las nuevas realidades que amenazan a la República de Panamá y al Canal de Panamá y por tanto, a la existencia de la Nación panameña.
En esa disertación, Mito Ríos, como lo conocemos popularmente, hizo un recorrido por el Gobierno populista de Omar y sus avances sociales y luego el gran proyecto nacionalista de las Negociaciones de los Tratados Torrijos Carter de 1977, a los cuales él y nosotros, nos opusimos con el no patriótico. Por lo que Mito Ríos, reconoció, lo que creíamos imposible en aquellos días: la recuperación del Canal a manos panameñas y el fin de lo que se llamó la “Zona del Canal”. Han sido avances de la Lucha Generacional que se inició con la conspiración conservadora-liberal de 1903 y el Tratado de 1903 que “ningún panameño firmó”.
Luego de ese recorrido, Mito Ríos, le planteó a la audiencia perredista que asistía al acto: ¿Qué aconsejaría Torrijos en estas circunstancias de amenazas, chantajes e intervencionismo de la Administración Trump sobre Panamá y su Canal? La respuesta de Mito Ríos fue contundente: seguir el pragmatismo Torrijista. Apoyar la formación de la unidad patriótica nacional con todos los sectores y apoyar al gobierno de José Raúl Milino en la presente coyuntura para que mantenga su posición patriótica de resistir la embestida de Trump, mediante el pragmatismo torrijista: negociar y seguir negociando. Bueno es que recordemos todos que nos enfrentamos al Imperio más poderoso de la tierra.
La demagogia politiquera de izquierda y de derecha, no gana guerras y la cobardía de muchos tampoco. Solo la unidad patriótica nacionalista, apoyando la negociación pragmática, la que Torrijos aplicó en 1977 con los tratados, puede ayudarnos a que la República Independiente sobreviva, lo mismo que su Canal Panameño.
Debemos entender cuáles son los intereses nacionales y cuáles son los intereses domésticos. Recordemos también que todos los ataques contra Mulino y su Gobierno en estos momentos, solo ayudan al enemigo exterior y debilitará las negociaciones pragmáticas que habrá que realizar para salvar a la República y al Canal de Panamá del intervencionismo de Trump.
Bien por Mito.