En una reciente vista en redes, pues los noticieros han perdido credibilidad, la penosamente recordada expresidente Mireya nos ha insinuado al pueblo que hay intenciones de hacerle un juicio político al Dictador civil. Lejos de ser solo un mero espectáculo de “cepillerìa” a su amigo, les da es una excelente idea para todos los diputados decentes que votaron en contra o se oponen a sus malas leyes, acuerdos y ocurrencias, así como su actuar dictatorial. Ella nos invita a esto, ya que él se opone a dialogar la derogación de ley de la Caja y el país está en franco deterioro de anarquía provocada por el mismo gobierno.
Obviamente para darse un juicio político, se requiere que la asamblea de diputados en su renovación de julio se ponga los pantalones largos y se definan los diputados “baila la vara” que son la bancada mulinista en otros partidos controlados desde los mismos sectores empresariales que le pagaron las campañas. Esta invitación de la Sra. Mireya será propicia para que los rebuscones y el conocido fariseo quizás se vendan más caro, para no hacer el juicio. Lo que diga la directiva actual de Asamblea ya no importará.
El juicio está regulado en el artículo 191 de la constitución, donde los causales son extralimitación de funciones constitucionales, delitos contra la personalidad internacional del estado o contra la administración pública, entre otras. Él retó al pueblo y nosotros exigimos que la Asamblea cumpla con la Constitución.
Médico y docente
